En la semana del 4 al 8 de noviembre se llevó a cabo en la facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de México, La semana nacional contra la corrupción. Algo a destacar de estos eventos fue sin duda el cierre, con la participación de niños en el panel de clausura, donde destacó su interés por un país libre y sobre todo sin corrupción.
Sergio, Arturo y Caro fueron los ganadores del cuarto concurso de dibujo infantil sobre la corrupción. Estos pequeños, durante su participación en el panel, hicieron valer su voz y la importancia de que sea escuchada, por lo que ellos tienen que aportar para erradicar este mal que tanto daño le ha hecho al país.
Ellos fueron los ganadores del concurso nacional infantil sobre la corrupción. Sorprendieron los temas que plasmaron en los dibujos con los que ganaron, pero más su decisión de exigir que los niños tienen voz y merecen ser escuchados.
Sergio, Arturo y Caro fueron en esta ocasión los representantes de millones de niños que piden educación digna, salud, espacios dignos para la distracción, viviendas dignas y otras cosas más que no requieren cuantiosas inversiones, ni tampoco distraer recursos humanos, para cumplir con esos sueños.
Lo único que piden es que se actúe con respeto y dignidad y no se aprovechen de lo que tenemos para beneficio de unos cuantos. Estos tres estudiantes de primaria pública del Estado de México tienen más que claro el país que sueñan en un futuro y expusieron que ese país depende de todos. Los adultos que hoy toman las decisiones, los jóvenes que están formándose y los niños por un país en el que cabemos todos y que seremos más felices si no hay corrupción.
Llamó mucho la atención al público asistente que plantearon como principio la ética y fomentar los valores del respeto, la confianza y muchos más para trabajar por un mejor México.
Y para rematar, Sergio, Arturo y Caro, externaron que ojalá estos temas no se queden solo en un panel o en un concurso de dibujo infantil, sino que lleguen a las autoridades para que estas tomen acciones para mejorar el rumbo de la nación.
Los asistentes a esa mesa estaban anonadados, en verdad, parecía que eran unos adultos los que estaban exponiendo y los que estaban analizando las condiciones en las que se encuentra el país y que, si hay voluntad, se pueden cambiar.
Y la voluntad es de todos, no sólo de la parte del gobierno, sino de todos los actores involucrados y que forman parte del estado mexicano.
Este foro en el que participaron estos pequeños es una muestra de qué los niños están enterados plenamente de lo que está pasando nuestro país, que no sólo están en los videojuegos o en las redes sociales, sino que también están involucrados en la problemática social.
Y no son los únicos, son millones a los que tenemos que voltear a ver, escuchar y sobre todo pedirles perdón, porque no les hemos dado la importancia que reviste su punto de vista ante lo que está pasando.
Sergio, Arturo y Caro fueron solo portavoces de lo que anhela toda la infancia mexicana y del mundo entero países sin corrupción y ser felices.