La estrategia de Morena para socializar las reformas constitucionales es muy básica pero efectiva. Los representantes de la 4T, quienes accedieron a cargos de elección popular mediante la bandera de la transformación, cobijados a la sobra del ex presidente AMLO y la ahora presidenta Claudia Sheinbaum, tienen que estar cercanos al pueblo para exponer y defender todo lo que represente “el cambio”.
Aunque parezca una estrategia trillada, o que ya ha sido usada antes por el PRI con sus sectores y organizaciones populares, la realidad es que no hay mejor forma de conectar con la ciudadanía y el electorado que estar en una campaña permanente como si se tratara de una elección eterna. Es decir, no hay votaciones, pero sí hay un papel que desempeñar y ante la gente cuenta el ver a su presidente municipal, a sus diputados, al gobernador, a sus senadores, con quien pueden dialogar, exponer puntos de vista, hablar de temas políticos, y desde luego exponer sus necesidades.
En Hidalgo se cumple a cabalidad con la consigna morenista de estar cerca de pueblo, y pese a todos los obstáculos internos producto de una mala organización partidista, con una dirigencia de baja popularidad, con personajes en los municipios y los poderes del estado que no son lo que la militancia esperaba (ex priistas, ex panistas, servidores que se expresan mal de AMLO y al 4T), pese a todo esto, se están alcanzando las metas propuestas por la dirigente nacional Luisa Alcalde.
El segundo piso de la Cuarta Transformación es precisamente establecer las bases ideológicas del obradorismo, a pesar de lo antes mencionado, al grado que ni siquiera esos personajes que poco aportan al movimiento que encabeza hoy la presidenta Claudia Sheinbaum puedan ser un impedimento para que la gente se acerque a sus representantes y tengan un trato directo.
Las formas de hacer política son totalmente diferentes a las de antes, y aunque exista la burocracia que se resiste a entenderlo, no pasará mucho tiempo hasta que terminen quitándose las máscaras y evidenciando sus verdaderas pasiones.
Mientras tanto, la misión de los morenistas de Hidalgo es mantener las asambleas informativas y ponerse a prueba delante del pueblo.