En Puebla, las instalaciones administrativas del Instituto Nacional de Migración (INM) operan como un centro de retención de migrantes, en medio de condiciones insalubres y donde no se tiene ningún cuidado por la salud de los menores de edad.
De acuerdo con el expediente CNDH/5/2024/2065/Q de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en la Oficina Administrativa del INM en la ciudad de Puebla, se detectó que estaban detenidos, aproximadamente 80 personas, de las cuales 30 eran niñas, niños y adolescentes.
Los migrantes detenidos por las autoridades mexicanas que ingresaron de manera irregular al país se encontraban hacinados; mientras que los baños de las instalaciones presentaban condiciones insalubres, situaciones que se traducen en violaciones a los derechos humanos.
A pesar de que, en su momento, el INM dio a conocer que las instalaciones en Puebla para albergar a migrantes estaban cerradas, en la realidad siguen operando como una estación provisional. Una bodega es destinada para que los llamados “sin papeles” permanezcan en espera de conocer a su futuro que, en la mayoría de los casos, es la deportación.
Las investigaciones de la CNDH revelaron que, a principios de este año, los migrantes que estaban en hacinamiento en las instalaciones del INM en Puebla, fueron detenidos durante acciones de verificación migratoria realizada en una caseta de cobro de la autopista Tehuacán-Oaxaca.
“Trasladados a la Oficina Administrativa de NNA del INM en Puebla, donde estuvieron en condiciones insalubres, sin que se respetaran las garantías del debido proceso, al no notificar de inmediato a la Procuraduría de Protección y al Sistema Estatal DIF ambos en Puebla para que les brindaran asistencia y su canalización a un Centro de Asistencia Social (CAS)”, detalla el documento.
Ante las agresiones que están sufriendo los migrantes, la CNDH llamó a que se respete el derecho al trato digno que está reconocido en la Constitución Política de México.
Sin duda que, como lo establece la CNDH, la detención migratoria criminaliza la migración irregular; además, se violan los derechos ante las precarias condiciones de alojamiento y de las instalaciones del INM.