Los migrantes que ingresaron de manera ilegal a Estados Unidos, entre ellos, los poblanos, se encuentran en peligro ante las amenazas y las acciones que implemente Donald Trump a partir de que inicie su segunda gestión el 20 de enero de 2025.
Por ahora, son amenazas del presidente electo del país vecino del norte; sin embargo, existe un plan en el que están incluidos los gobernadores y en el que se programan acciones de deportación y trabajos para reforzar el muro fronterizo.
El plan contra los migrantes de la próxima gestión se basa en dos acciones; la primera consiste en reforzar sus barreras, utilizando a México y a Canadá como sus muros de contención; y, una segunda medida, consiste en deportar a quienes ingresaron de forma irregular en los últimos años.
Desde su residencia en Palm Beach, Florida, en conferencia de prensa, Donald Trump, quien forma parte del Partido Republicano, reveló que solicitó a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, que se conviertan en barreras contra los migrantes.
De la misma forma, Donald Trump continuará con la construcción del muro fronterizo con México, pese a que costará "cientos de millones" de dólares más que el primer tramo que hizo en su primer mandato, entre los años 2017 y 2021.
A la par y, a pesar de que son millones los migrantes que se encuentran en una situación irregular, Trump programa algunas deportaciones masivas con el objetivo de hacerse presente y legitimarse ante sus seguidores y detractores.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional del Migrante, el pasado miércoles 18 de diciembre, un centenar de migrantes protestaron en el puerto Internacional de San Ysidro, en la ciudad de Tijuana, contra las amenazas de deportaciones masivas de Trump.
En las deportaciones, existe la posibilidad de que los migrantes poblanos sean afectados. En caso de un regreso masivo de migrantes, las autoridades mexicanas y, en particular, las poblanas, no están preparadas para brindarles apoyo. Es momento de poner en marcha planes de emergencia porque, en cualquier, momento puede comenzar la peor página para los migrantes y sus familias.