Rusia se ha convertido en el paraíso de las familias conservadoras de Occidente. El 19 de agosto pasado Vladimir Putin firmó un decreto para facilitar la inmigración de personas y familias, aun cuando provengan de países hostiles, como Estados Unidos. Además ha abierto una oficina en la Duma (la asamblea legislativa) que coordina la llegada de los inmigrantes occidentales.
La motivación de Putin es clarísima: quiere llenar el hueco que dejó el millón de ejecutivos y especialistas en informática que emigraron cuando empezó la guerra. Esta historia acaba de publicarla la revista inglesa The Spectator (“Moscow Rules”, Owen Matthews, 2 de noviembre).
La motivación de los miles de occidentales que ya han emigrado a Rusia es una combinación de factores sociales, morales y económicos. Ya en 1920 hubo otra ola de occidentales que emigraron a Rusia, persiguiendo el sueño igualitario del comunismo, y la cosa terminó mal: en el Gulag.
Los inmigrantes de hoy, que son básicamente católicos, protestantes y ortodoxos recién convertidos, más que perseguir un sueño, huyen de eso que perciben como la decadencia de Occidente: la agenda LGBT, aupada por Hollywood y los gobiernos demócratas, el incremento de gente sin techo, de drogadictos, el declive moral en suma, más la obligatoriedad de vacunarse.
A estos nuevos rusos el gobierno les gestiona empleos y les facilita la compra de parcelas, o de casas o departamentos. Además están las ventajas fiscales y la libertad de expresión que, dicen, es mucho mayor que en Estados Unidos y demás países occidentales (mientras no te metas con Putin, supongo yo).
Rusia es, más por los excesos de Occidente que por méritos propios, un territorio libre de ideología woke y de la cultura de la cancelación. Encima no es necesario hablar ruso para apuntarse a este programa (quizá esto, pienso, esté relacionado con la forma en que se percibe la libertad de expresión).
Rusia, declara un nuevo ruso, ex gringo, a The Spectator, es un país en el que “los hombres actúan como hombres y las mujeres como mujeres”.