¿En qué se parecen el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales y el Tribunal de Justicia Administrativa?
Si la respuesta es que ambos son organismos con autonomía constitucional, es correcta, conforme lo señalan los artículos 17, fracción V, y 153 bis, de la Constitución Política de Tamaulipas.
Si respondió que los dos son parte del Sistema Estatal Anticorrupción, está en lo correcto, de acuerdo con el artículo 154 constitucional.
Pero existe otra coincidencia de índole político, que une irremediablemente al Itait con el TJA, como a los gemelos Chang y Eng Búnker, nacidos en Sian (Tailandia) en 1811.
Me refiero a la captura de ambos organismos, por parte del PAN que obedece a Francisco García Cabeza de Vaca.
En el caso del Instituto de Transparencia, su presidenta, Dulce Adriana Rocha Sobrevilla, fue regidora panista en Reynosa y dirigente estatal del blanquiazul, relevando a Ismael García Cabeza de Vaca.
La consecuencia política de esta captura fue la participación del personal del instituto a favor del candidato panista en la elección gubernamental de 2022, y negar la información del gobierno de Cabeza de Vaca.
Igual sucede con el Tribunal de Justicia Administrativa, presidido por Édgar Uriza Alanís, quien fue asesor jurídico del Comité Directivo Estatal del PAN y representante blanquiazul ante el Instituto Electoral de Tamaulipas.
Otro de los magistrados, Jesús Gerardo Aldape Ballesteros, antes de llegar al TJA fue alcalde panista en Valle Hermoso, mientras que Alejandro Guerra Martínez tuvo que renunciar a una patente de aspirante a Notario Público, al ser obsequiada por Cabeza de Vaca, violando la Ley del Notariado.
Manoseado por el PAN de Cabeza de Vaca, el Tribunal perdió su autonomía, obstruyendo las demandas contra la corrupción del sexenio anterior, como lo denunció recientemente la consejera jurídica del Gobierno del Estado.
En aras de cuidar la espalda al ex gobernador, ambos organismos tiraron por la borda su legitimidad y razón de ser.
Hoy, pintados de azul, los siameses están en la mira de la mayoría calificada de Morena y sus aliados, en la Legislatura local, a la que presentó su renuncia el fiscal Anticorrupción para salvar el pellejo.