El discurso y el constante comportamiento errático del presidente Trump pone nerviosos y en terreno volátil a los indicadores y mercados financieros. Es cierto que para negociar él amenaza y pone en la lona a sus contrapartes y si no gana o saca ventaja, no está conforme. La negociación, el ganar-ganar, no está en su panorama. Y como se trata de la economía más grande y poderosa del mundo, se aprovecha de esa ventajosa situación.
Hoy el problema más grande que enfrenta para negociar y cumplir sus amenazas lo tiene al interior: se trata de la inflación. Si Trump cumple su plan arancelario con México, Canadá, China y el mundo, la inflación que enfrentaría sería mucho peor, y la necesidad de subir tasas puede sumir en una recesión económica a Estados Unidos. La medicina para luchar contra este impuesto inflacionario que arrastramos desde el covid se llama política monetaria restrictiva, es decir, subir las tasas de interés.
El tema es que eso es justo lo peor que se le puede hacer al crecimiento económico, ya que el financiamiento es caro e inviable para los agentes productivos. Así que por mucha amenaza y mucha presión, si Trump lleva a cabo su plan, el daño se lo hará a su propio país, por lo que esperemos que no se materialice. Ahora bien, Trump es tan arrogante y necio que todo se puede esperar.
A lo anterior hay que sumar un enemigo adicional: los indicadores económicos se están desacelerando. Tanto el consumo como la actividad manufacturera se ralentizan.
Esta semana continúan los reportes corporativos. De seguir así la temporada —donde predominan los buenos resultados—, los índices seguramente seguirán subiendo y rompiendo máximos históricos.
El empleo también puede resentir en el corto plazo los efectos de la sociedad Trump-Musk, donde el segundo ha prometido eficientar la estructura gubernamental, lo que se traducirá en miles de despidos. Musk hoy se mete en todo y Trump se lo permite. Evidentemente, le debe mucho. A ver cuánto dura esta peligrosa amistad.
En México, esta semana se publica el crecimiento del cuarto trimestre de 2024 y, con ello, la cifra anual. Además, se dará a conocer el informe trimestral de Banco de México.
El tipo de cambio se mantiene razonablemente estable. No considera que las amenazas de Trump se materialicen.