Es oficial. Banamex es una institución independiente. El 1 de diciembre Citigroup finalizó la separación de su negocio de banca institucional del de banca de menudeo. Esta medida forma parte de la estrategia de Jane Fraser, CEO de Citi, de desprenderse de sus negocios internacionales de banca de consumo (de los cuales Banamex es el más importante) para enfocarse en grandes empresas e individuos acaudalados. El siguiente paso es vender Banamex.
Para los mexicanos, la estrategia de Fraser son buenas noticias. Citi nunca manejó bien su banco de menudeo en México y, en general, tampoco ha sido muy efectivo en manejar el negocio global (su acción ha tenido un desempeño muy por debajo del de instituciones financieras similares y hoy vale apenas 20% del máximo que alcanzó en 2006).
Fuera del control de un corporativo estadunidense y libre para tomar sus propias decisiones, Banamex puede aspirar a un mejor desempeño, generando mayor competencia y ampliando las opciones bancarias para los ahorradores mexicanos.
Anticipo mucho interés por Banamex. La banca de menudeo en México puede ser un gran negocio, como es evidente por los resultados de bancos como Banorte y, en particular, BBVA México, que con la enorme presencia de su banca de consumo es una máquina de hacer dinero. Con mil 300 sucursales y 20 millones de clientes, Banamex cuenta con una plataforma envidiable para regresar a sus épocas de gloria.
Citi ha manifestado su intención de colocar las acciones de Banamex en las bolsas tanto de Estados Unidos como de México a finales de 2025. La idea es vender una parte del banco en una oferta pública inicial (IPO, por su sigla en inglés) y el resto de su posición a lo largo del tiempo. Aunque tiene ciertas ventajas, esta opción de salida de Citi no es la idónea. Puede que la valuación que obtenga sea la más justificable posible (es el mercado accionario quien la determinará); sin embargo, tardará tiempo en salirse por completo de su inversión.
Bajo este escenario, no existirá un dueño en particular, sino que la composición accionaria quedará pulverizada en el mercado; lo mismo que sucede con la de bancos como JP Morgan y BBVA. En estos casos, son los grandes manejadores internacionales de fondos, como BlackRock y Vanguard, quienes, a nombre de sus clientes, mantienen importantes participaciones accionarias. Manejadores mexicanos seguramente invertirían en Banamex, pero el porcentaje relativo que obtendrían sería reducido.
Otra alternativa que tiene Citi es vender Banamex a un grupo de inversionistas en lugar de sacarlo a la bolsa, lo que le permitiría salirse de un solo golpe. Hace un par de años trató de vender el banco a inversionistas mexicanos, pero la coyuntura política y la complejidad de separar el banco de menudeo en esos momentos sepultaron esta posibilidad. No veo por qué no se pueda revivir.
El gobierno mexicano tendrá mucho qué decir acerca del futuro de Banamex y no descarto que presione para colocarlo en manos mexicanas.