Se llegaron las vacaciones decembrinas, muchos laguneros ya tienen las maletas listas y otros prácticamente ya se encuentran en los distintos centros turísticos no solamente del país, sino de los Estados Unidos y otros más del otro lado del charco.
Los laguneros han adoptado al puerto de Mazatlán, por lo que han decidido jugársela, arriesgarse a disfrutar de las paradisiacas playas, de sus excelentes hoteles con sus hermosas albercas.
Además, también viajan para degustar de la deliciosa gastronomía que se tiene en el bello puerto mazatleco y comer sus mariscos es algo digno de los dioses.
De todos es conocidos que la violencia le ha pegado mucho a Mazatlán, que se han presentado muchos decesos debido a la violencia extrema entre dos grupos delictivos y lo cual ha provocado que el turismo se alejara en forma considerable.
Las noticias que aparecen en los medios de comunicación de lo que sucede tanto en la ciudad de Culiacán como en Mazatlán, les han hecho mucho daño, ya que después de que principalmente el puerto se convirtiera en un punto de visita obligado entre los mexicanos, ahora muchos prefieren cambiar de destino y buscan otras opciones.
Quienes también la están sufriendo son los que viven del turismo, los hoteleros, los restauranteros, los mismos transportistas, los choferes de las llamadas “pulmonías”, así como de los mismos pescadores, ya que sus ventas se han desplomado ante la falta de turistas.
Se habla mucho de lo que sucede en las carreteras que convergen con Mazatlán, en las cuales se corre el riego de toparse con algún grupo armado o bien quedar en medio de un fuego cruzado.
Esto lo saben los laguneros, muchos de los cuales con todas las precauciones debidas y viajando de día, confían en llegar a la zona turística de Mazatlán y no salir de la misma, para disfrutar de unos buenos días de descanso.
Saben quienes van a viajar, que los enfrentamientos están muy dirigidos, que la violencia se da en sectores habitacionales y que hasta el momento no han afectado a la zona turística, por lo que se dice que vale la pena arriesgarse.
Además, los prestadores de servicios, están ofreciendo buenos paquetes tanto en hospedaje, alimentos y atractivos turísticos, por lo que habitantes de La Laguna quieren pese al peligro, aprovechar la oportunidad.
Walter.juarez@milenio.com