Qué noche la de anoche. El 18 de septiembre de 2024 tuvimos el privilegio de escuchar al tenor Rolando Villazón.
El concierto fue en el Teatro Martínez, ese teatro maravilloso lleno de pinturas de Salvador Tarazona donde en el plafón central hay una pintura llamada “La inspiración”.
El concierto se da en el marco del 117 Aniversario de Torreón, en donde como siempre el Ayuntamiento de Torreón, la comunidad y empresas laguneras apoyaron esta iniciativa.
Un día antes del concierto Rolando presentó su libro en El Siglo de Torreón: Amadeus en bicicleta acompañado por Gerardo Klein Burg y Enrique Alfaro Llerena en donde adelanta su admiración a Mozart.
En el programa de mano del concierto aparece una entrevista de Gerardo Kleinburg: Retrato de un cronopio.
En la misma le pregunta al tenor sobre Julio Cortázar y su gran novela Rayuela. Rolando contesta: “¿Por qué vives en Paris? Respondo ….. quise vivir una página de Julio Cortázar.
La ficción es parte de la realidad ……… Creo que todas las actividades profesionales que realizo tienen que ver con la creatividad, con el juego y por lo tanto con la ficción”. Háblame de tu relación con Mozart:
“Mozart es un maestro de vida además de un genio: escuchar su música es una experiencia de luz, alegría y el sentimiento de estar aquí y ahora con la belleza de este momento.
Pero también hay pasajes de profundidad, melancolía, lo sublime y la nostalgia, lo que no está, lo que nos falta. Sin embargo siempre vuelve a la luz y a la sonrisa.”
Rolando con gran generosidad nos ofreció un concierto de lujo acompañado de la Camerata de Coahuila, a cargo del director Ramón Shade, y de la soprano Anabel de la Mora, y la mezzosoprano Itzeli del Rosario.
Escuchamos a Mozart, Verdi, Rossini, Donizetti, Offenbach, Soutullo y Juan Vert, Gerónimo Giménez Moreno Torroba, Manuel Penella.
Nuestro tenor tuvo un gesto memorable, en el escenario se puso la camiseta del Santos, nuestro equipo lagunero de futbol, el público estalló en aplausos, fue un gesto que el público lo apreció.
Tres horas escuchando al tenor, algo no visto en años.
Al final cuando canta Granada, esa pieza icónica escrita por Agustín Lara fue para todos los espectadores el final de un concierto de lujo.
Vamos a seguir escuchado su música y sí, tenemos que leer su libro Amadeus en bicicleta y también la entrevista de Gerardo Kleinburg que nos permite conocer a Rolando Villazón.