La Fiscalía General de la República (FGR) quiere ver tras las rejas a un antiguo aliado, el juez Enrique Beltrán Santes.
La moraleja que entrega este caso merece atenderse: pasó de ser amigo a enemigo o, dicho en lenguaje de abogado, pasó de ser juez de consigna (a modo) a sujeto consignado.
Cada vez que la FGR necesitó quien le hiciera un trabajo indecente dentro del Poder Judicial federal, contó con la disposición de Beltrán Santes. Por ejemplo, cuando por motivos político-electorales se fabricaron las acusaciones por lavado de dinero y delincuencia organizada en contra del exgobernador panista de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Tales acusaciones no tuvieron jamás sustento y sin embargo Beltrán Santes se prestó para retorcer la escasa evidencia y dictó una orden de aprehensión muy pocas semanas antes de las elecciones federales que se celebraron en junio del 2021.
Luego, la defensa de Cabeza de Vaca logró echar abajo aquel proceso, aunque ya era tarde para revertir el daño moral y político que cayó sobre ese mandatario y su partido.
En junio de 2023, la FGR volvió a emplear al mismo juez para desviar el curso que llevaba la investigación del caso Ayotzinapa. Sin informar a Omar Gómez Trejo, entonces fiscal especial del caso, Alejandro Gertz Manero recurrió de nuevo a Beltrán Santes para que cancelara dieciséis órdenes de aprehensión en contra de militares involucrados con la desaparición de los jóvenes normalistas. Aquel episodio fue uno de los más penosos en la gestión de la actual fiscalía. Mientras un brazo de esa dependencia había logrado detener a funcionarios castrenses presuntamente responsables, otro brazo, en complicidad con el juez Beltrán Santes, les liberó. Días después el fiscal especial presentó su renuncia.
Es común que los lacayos terminen mal. Esto es justo lo que le está pasando a quien fuera uno de los jueces favoritos de consigna de la FGR. Este fin de semana, esta misma dependencia anunció que procederá a investigar, por presunta corrupción, al juez Beltrán Santes, ya que cambió la medida cautelar que tenía tras las rejas a Víctor Garcés, ex directivo de la Cooperativa Cruz Azul.
Zoom: siempre ha habido jueces de consigna que intercambian favores por sentencias. Que sirva el caso de Beltrán Santes para predecir el final que suelen tener estas historias; sobre todo a partir de ahora que ese tipo de jueces tenderán a ser mayoría.