Un aspecto puntualizado por la Asociación Mexicana de Profesionistas Inmobiliarios, ahora con la presidencia en manos de un socio originario de Tamaulipas, Emilio Rojas Cobián, es la evolución del mercado en México a nivel por los destinos turísticos en el país donde la relación sea descanso y esparcimiento, con elementos naturales como el potencial de infraestructura.
Es una lista de nueve regiones, consideradas la mayoría con vista hacia el mar, caso Tijuana, Los Cabos, Mazatlán, Acapulco, Cancún y Veracruz por mencionar algunos, complementados por las grandes urbes Monterrey, Guadalajara, Ciudad de México y Puebla. Nuestro estado, claramente, no figura.
En este nivel nos encontramos cuando el interesado busca nuevas opciones por asuntos propiamente de comodidad. Las ciudades antes mencionadas están saturadas y abre paso analizar lugares más tranquilos y nuevos, alejarse un poquito de Status Quo. Ahí es donde entra Tampico y Ciudad Madero.
En datos de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (Canadevi), esta región al noreste del país es la de menor avance en construcciones verticales. Por supuesto, la zona norte no lo necesita, cuenta con una amplitud de terrenos en Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo.
Acá en el sur está la problemática y fuerte. Las condiciones no solo es por la contada reserva territorial, también es lo cara que se puso durante los últimos cuatro años, con una alta demanda para instalar edificios de más de 10 pisos habitacionales con comercio añadido, pero poca oferta. A eso sumemos la actitud de vecinos de Lomas de Rosales, Águila, Altavista y Petrolera renuentes a este tipo de proyectos.
Nos quedamos solamente con la opción de la costa. Si bien el tema legal es el handicap, las acciones de la autoridad estatal y municipal por ofrecerle a la iniciativa privada las opciones de crecer esta zona en el ramo bienes raíces parecen tener un avance. Ya se dio al aclarar el engaño a empresarios de predio de 6 hectáreas, lotes “vendidos” por la administración de Francisco García Cabeza de Vaca.
¿Playa Miramar puede ser el nuevo paraíso inmobiliario en México? Tiene todas las condiciones. El siguiente paso es dar esa certeza al inversionista.