La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó el homicidio del activista José Román Rubio López, dirigente del “Colectivo Tarahumara Sinaloense”.
Asimismo, exigió a la Fiscalía General del Estado de Sinaloa realizar una investigación eficiente, objetiva, pronta e imparcial, en la que se identifique y localice a los autores materiales e intelectuales del homicidio, considerando en sus líneas de investigación la labor que en vida realizaba la víctima.
De acuerdo con la CNDH, de la información trascendida en medios informativos, se observó que el 20 de julio, el activista Rubio López fue extraído de su domicilio por personas armadas, sin que se conozca su paradero hasta el momento de la localización del cuerpo.
La CNDH, en concordancia con lo expresado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), advirtió que los asesinatos, actos de violencia y otros ataques cometidos en contra de las y los defensores de derechos humanos afectan las garantías y derechos propios de todo ser humano, pues atentan contra el papel fundamental que toman en la sociedad.
“Cuando se silencia la labor de activismo, se perjudica a todas aquellas personas y causas para quienes se trabaja, dejándoles en un estado de mayor vulnerabilidad e incluso hasta la indefensión, como sucede en este caso respecto de los pueblos Tarahumaras, en Sinaloa”, precisó la CNDH.
ROA