A pesar de que en las instituciones educativas les están entregando una guía educativa para mantener ocupados a los niños que dejarán de asistir por poco más de un mes a la escuela debido a la contingencia por Covid-19, las madres de familia comentan que es una situación complicada el tenerlos todo el día en casa ya que, además de que los pequeños se aburren de estar encerrados, también ellas gastan más porque le piden más cosas a la hora del almuerzo y de la comida.
La señora Carmen Aguirre, es una de las madres de familia afectadas ya que ella trabaja en una tiendita escolar y ante la suspensión de clases pues también dejará de recibir ingresos y tendrá más gastos al tener a su hijo en casa.
“Sí afecta porque con lo poquito de uno gana, sí afecta para comprar las tortillas o algo y pues como los vamos a tener en casa ya que a veces que el almuerzo piden más cosas, entonces es más gasto, va a requerir más gasto el estar ahí en casa; aquí nos dejaron como una guía para ponerlos a trabajar, el maestro de él nos puso actividades para que lo realicen en casa porque nos dicen que no son vacaciones, que es aislamiento para estudiar”.
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La situación se complica aún más cuando madres de familia tienen que atender negocios propios y no tienen con quién dejar a sus hijos para que alguien se los cuide y por tanto tienen que llevárselos con ellas.
“De hecho aquí nada más voy a abrir por las mañanas, ahorita durante este mes, ahorita me los traje porque ya estaban fastidiados de estar encerrados y ya después toda la tare voy a estar con ellos ahí en la casa”, dijo Lupita Gutiérrez, comerciante.
“Ahora sí que un ojo al negocio y otro ojo a los hijos, no tengo con quien dejarlo, toda mi familia trabaja”, comentó Blanca Jiménez, vendedora ambulante.