Al menos 68 mujeres y niños han sido rescatados tras ser secuestrados después de que en la última semana de diciembre se produjeron choques tribales entre dos tribus en los que murieron caso 60 personas, aseguró la misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS).
"Elogiamos a las autoridades de Jonglei (este) por sus esfuerzos, en los que hemos participado, que han conducido a la liberación de 68 mujeres y niños murle secuestrados", indicó el representante especial de la misión de Naciones Unidas, Nicholas Haysom, en un comunicado.
Aseguró que los agentes de protección les están proporcionando "cuidados provisionales y servicios humanitarios hasta que puedan reunirse con sus familias" y reiteró que "hay que poner fin a la bárbara práctica de los secuestros. Esta lacra contribuye a mantener la inseguridad y socava la propia integridad de las comunidades".
La escalada de violencia en el Área Administrativa del Gran Pibor y en el estado de Jonglei, que comenzó a finales de diciembre, es motivo de especial preocupación para la ONU.
"Impactante ha sido el número de mujeres y niños secuestrados, y los que se han enfrentado a graves violaciones de sus derechos, incluidos la violencia y los abusos sexuales relacionados con el conflicto", aseveró.
El pasado 27 diciembre, las autoridades locales informaron de que al menos 56 personas murieron por choques tribales entre jóvenes armados del condado de Pibor y del estado de Jonglei.
El conflicto se produjo entre las tribus Murle y Nuer, el segundo grupo étnico más grande de Sudán del Sur.
Por otro lado, el ministro de Información del estado de Jonglei, John Samuel Manyuon, declaró a la emisora local Eye Radio que hubo una "negociación pacífica" con los secuestradores dado que era "la mejor idea en comparación con una táctica de fuerza que podría desembocar en enfrentamientos".
Sudán del Sur se independizó de Sudán en 2011 y dos años después se sumergió en una guerra civil que se prolongó hasta 2020 y en la que se calcula que murieron unas 400 mil personas y que varios cientos de miles más se vieron obligadas a desplazarse o dejar el país.
LG