La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) llamó al Congreso local a dar marcha atrás al dictamen de protección a la vida que penalizaría el aborto en Nuevo León, al advertir que tal decisión viola la Constitución y los derechos de la mujer.
A través de un comunicado, el ombudsman local resaltó que la reforma constitucional que se aprobó este martes en la Comisión de Puntos Constitucionales es incompatible con las disposiciones establecidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) e incluso la Carta Magna.
Esta modificación, impulsada por el Partido Acción Nacional (PAN), tiene la finalidad de proteger al ser humano desde el momento de la fecundación, a pesar de que la CIDH ha confirmado de forma reiterada que no se le puede otorgar el estatus de persona a un embrión.
Por otra parte, la CEDH consideró que la aprobación de este dictamen en el Pleno del Congreso podría limitar el derecho de autonomía de las personas, al igual que los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
"La aprobación de este dictamen representaría limitar, entre otros (...), los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, a las que se les excluiría de tener la posibilidad de utilizar métodos anticonceptivos susceptibles de tener efectos anti-implantatorios, poniéndolas en riesgo de ser sancionadas penalmente por su uso; asimismo, colocaría a las mujeres solo como un medio o lugar para el desarrollo del embrión, siendo accesorias al producto que se gesta en su cuerpo, restringiendo el ejercicio de sus derechos", cita el comunicado.
Por tal motivo, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, presidida por Sofía Velasco, insistió al Poder Legislativo que frenara la aprobación de la propuesta que contradice los tratados internacionales y convertiría al aborto en motivo de cárcel.