Recientemente se dio a conocer la primera muerte por rabia en México, luego de 19 años en los que el país no había presentado un solo caso del virus. Aunque los hechos ocurrieron en febrero y marzo, las autoridades recién hicieron del conocimiento público la noticia.
Hasta el momento sólo se habían tenido casos sospechosos, pero el fallecimiento de un paciente en Quintana Roo activó las alertas sanitarias y provocó que las autoridades reforzaran las campañas de vacunación de perros y gatos contra la rabia.
Pero, ¿qué sabemos de este caso? Te contamos.
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Esto sabemos del primer caso de rabia
De acuerdo con los primeros reportes, la víctima de rabia era un hombre de 67 años de edad, quien se dedicaba al rescate de gatos en situación de calle en la zona de Cancún. El contagio ocurrió el 4 de enero, cuando en una de sus diligencias fue mordido accidentalmente por un felino al que ayudó y no estaba vacunado contra el virus.
El cuadro clínico inició un mes posterior a esta fecha, cuando el hombre comenzó a presentar malestar general y dolor en la mano que había entrado en contacto con la saliva del animal. Fue hasta el 1 de febrero cuando la víctima acudió a recibir atención médica a la Cruz Roja.
No obstante, al no recibir un diagnóstico certero, acudió con otros cuatro médicos, pero ninguno pudo clarificar los síntomas.
El paciente comenzó a presentar síntomas respiratorios, dolor y hormigueo y pinchazos en el sitio de la mordida. Al empeorar su condición, ingresó al Hospital General Regional número 17 del IMSS.
Más tarde presentó un deterioro neurológico, hasta su muerte el 11 de febrero.
Las autoridades confirmaron hasta esta semana su muerte por el virus de la rabia. Esto, debido a que se llevaron a cabo diversos análisis realizados por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) que al final arrojaron un resultado positivo a rabia humana.
Ante la muerte del paciente, las autoridades implementaron medidas de control y prevención, por lo que se aplicaron los protocolos de sanidad con la vacunación de más de 3 mil caninos y felinos en la zona donde se registró el caso.
¿Cómo se contagia?
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la rabia afecta a más de 150 países y territorios y ocasiona todos los años decenas de miles de muertes, principalmente en Asia y África, el 40 por ciento de las cuales son de niños menores de 15 años.
En la gran mayoría de las muertes por rabia, el perro es la fuente de infección, y el origen del contagio en el 99 por ciento de los casos de transmisión a los humanos. Por ese motivo, la rabia puede prevenirse vacunando a los perros y evitando sus mordeduras.
Se trata de una enfermedad viral que es mortal pero prevenible. Se puede propagar a las personas y las mascotas si las muerde o rasguña un animal con rabia.
El virus de la rabia infecta el sistema nervioso central. Si una persona no recibe la atención médica adecuada después de una posible exposición a la rabia, el virus puede causar la enfermedad en el cerebro y, por último, la muerte.
¿Qué hacer si te muerde un animal rabioso?
Si se cree que se ha recibido una mordedura de un animal rabioso, se deben aplicar medidas profilácticas posexposición (PPE), que pueden salvar la vida de la víctima, como lavar de inmediato y a fondo la herida con agua y jabón durante 15 minutos, poner una serie de vacunas antirrábicas y administrar anticuerpos monoclonales o inmunoglobulinas antirrábicas.
Es importante recordar que la rabia se puede prevenir administrando una vacuna. Asimismo, la inoculación de perros, incluidos sus cachorros, es la estrategia más eficaz para prevenir la enfermedad en humanos, porque se interviene en la fuente de infección. Además, se evita la necesidad de administrar PPE.
La educación sobre la conducta de los perros y la prevención de las mordeduras, tanto para los adultos como para los niños, es fundamental en todo programa de vacunación contra la rabia si se pretende reducir su incidencia en el ser humano y el gasto en el tratamiento de las mordeduras.
LP