Funciones dobles en la Tradicional Pastorela Mexicana

Una verdadera fiesta decembrina es la que disfruta el público que asiste a la Tradicional Pastorela Mexicana en los jardines del Centro Cultural Helénico, al sur de la ciudad.

En el siglo XVII que se registra un mestizaje de culturas en una colorida representación en la época navideña. FOTO: Leilani Montero
Ciudad de México /

Una verdadera fiesta decembrina es la que disfruta el público que asiste a la Tradicional Pastorela Mexicana en los jardines del Centro Cultural Helénico, al sur de la ciudad.

De principio fin los actores de esta puesta invitan a los asistentes a realizar un recorrido por aquellos años en que en México se gozaba con las piñatas, el ponche y los canciones navideñas como parte de la historia de las pastorelas.

Esa costumbre surge a raíz de la evangelización católica por parte de la orden religiosa Jesuita, en la llamada Nueva España. Es en el siglo XVII que se registra un mestizaje de culturas en una colorida representación en la época navideña.

Dicho encuentro de dos culturas: la prehispánica y la española, es dirigido por Rafael Pardo Ortiz, quien reúne a un gran reparto.

El objetivo, desde hace 35 de la Tradicional Pastorela Mexicana, cuyo lema es ¡vivir las tradiciones fortalece nuestra identidad!, es preservar las costumbres de los mexicanos para que las nuevas generaciones no las olviden.

Y realmente lo logran, porque envuelven a la audiencia y la transportan al siglo pasado, con el tradicional ponche de frutas con o sin piquete.

Es una obra que mantiene al auditorio riendo de principio a fin, con las actuaciones sensacionales de los personajes del averno comandados por Lucifer, interpretado magistralmente por Gregorio Cordero, caracterizado como el mismísimo revolucionario que primero fusila y después “verigua”.

Los siete pecados capitales: ira, lujuria, envidia, soberbia, avaricia, gula, pereza, son encarnados de una forma insuperable, por Armando Tapia, Fabo Varona, Alicia Lara, Indra Duarte, Félix Terán, Eric Ramírez, Miguel Ángel Morales, respectivamente.

Dichos demonios cómicos en cada una de sus participaciones arrancan la carcajada del respetable, una vez que suben a la tierra para impedir que los pastores, desde Toluca, lleguen al portal de Belén, donde nacerá el niño Dios.

Los pastores son personalizados por Juan Carlos Cuéllar, como Inocencio; Javier Castany en el papel de Macario; Félix Terán como Simeón; Fernando Gurrola es San Rafael; Viridiana Robles aparece como Rosa; Yolanda Navarrete es la graciosa Filomena; Eugenia Olson hace a la abuela; y la niña Greta Basagoitia interpreta a Xóchitl.

Desde hace 35 de la Tradicional Pastorela Mexicana, cuyo lema es ¡vivir las tradiciones fortalece nuestra identidad! FOTO: Leilani Montero

Pese a que caen en algunas trampas de los demonios, los pastores logran, orientados por el Arcángel San Miguel, interpretado por Enrique Chi, logran llegar hasta el pesebre donde ha nacido el hijo de la Virgen María para rendirle tributo y ofrecerle algunos pequeños presentes.

Los reyes magos aparecen en la Tradicional Pastorela Mexicana, son unas mojigangas que cobran vida por Alicia Lara, Félix Terán y Lucía Carrillo, con las voces de los desaparecidos Héctor Bonilla y Enrique Rocha, además de Juan Ferrara.

Como todo en esta vida tienen que evolucionar, sus textos y partituras están súper actualizados tanto en las noticias del día, como en las jergas usadas en la actualidad: “las fake news”, “la selfie”, “el #”, y “el aifon”.

El elenco hizo a los asistentes, partícipes de la tradicional “Pedida de posada” los dividió, los del lado izquierdo cantaron como peregrinos: “En el nombre del cielo, os pido posada pues no puede andar, mi esposa amada…”.

En tanto que los del lado derecho entonaron al Casero: “Aquí no es mesón, sigan adelante, yo no puedo abrir, no sea algún tunante…".

Por supuesto que la música no podía faltar, se entonó la tradicional Rama: “Naranjas y limas, limas y limones más linda es la Virgen que todas las flores. Anda borreguito vamos a Belén, a ver la Virgen y al niño también…”, una de las canciones que acostumbran cantar los niños de Veracruz, durante las posadas, de casa en casa, llevando una rama adornada de cadenas de papel de china, farolitos y hasta esferas, a cambio de dulces o de unas monedas.

Para cerrar la posada al unísono todos cantaron el “Entre santos peregrinos, peregrinos reciban este rincón, que aunque es pobre la morada, la morada, os la doy de corazón”.

Ante el asombro de chicos y grandes se rifaron piñatas y para exaltar más la alegría y felicidad de los asistentes, lanzaron hasta fuegos artificiales.

Para cerrar con broche de oro y seguir la tradición, los asistentes saborearon de un atole caliente y unos deliciosos tamalitos, removiéndoles los recuerdos de cuando fueron niños y acudían a las posadas de sus barrios y de sus colonias.

¿Cuándo puedo verla?

La Tradicional Pastorela Mexicana ofrecerá funciones dobles los días 25, 26 y 27 de diciembre: a las 18:00 horas y a las 20:15 horas en el Centro Cultural Helénico.

MGR

  • Leticia Sánchez Medel
  • letymedel@yahoo.com.mx
  • Reportera cultural, cursó la maestría en Periodismo Político, es autora de tres libros sobre la historia inédita del Cervantino.

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