Tres marineros que daban la vuelta la mundo llegaron sanos y salvos a tierra en Australia luego de que unos tiburones estuvieran a punto de hundir su catamarán en el Mar del Coral.
Los dos cascos hinchables de su embarcación de 9 metros de largo resultaron dañados en varios ataques de lo que se cree que eran tiburones cigarro, una especie pequeña que no se considera peligrosa para los humanos.
Las imágenes aéreas del rescate mostraron importantes desperfectos en el barco, que estaba casi sumergido y había pedido por completo la sección delantera de uno de los cascos.
La Autoridad Australiana de Seguridad Marítima coordinó el rescate de los dos marineros rusos y uno francés que habían activado una baliza de emergencia a primera hora del miércoles a 835 kilómetros al sureste de la ciudad de Cairns, en el estado de Queensland.
Fueron rescatados por un mercante de bandera panameña que los desembarcó en el puerto de Mooloolaba, en la Costa Dorada, al norte de la capital provincial, Brisbane, dijo la agencia.
Stanislav Beryozkin, uno de los rescatados, dijo que sospechaba que los tiburones habían confundido su barco con una ballena.
Según contó, la tripulación se había preparado para los tiburones, pero no en esa cantidad. “Había muchos. Quizás 20, quizás 30, quizás más”, relató Beryozkin a la televisora Seven News.
Habían protegido los cascos hinchables con material de doble capa. “Pero algunos de ellos saltaron y mordieron por encima del material doble”, agregó.
Beryozkin, Evgeny Kovalevsky y el francés Vincent Thomas Garate habían zarpado desde San Petersburgo, Rusia, el 1 de julio de 2021, y estaban navegando desde Vanuatu a Cairns cuando sufrieron los problemas.
Los tiburones cigarro alcanzan una longitud de entre 42 y 56 centímetros y reciben su nombre de los huecos circulares que dejan la morder a sus presas.
SNGZ