En el último día de campañas en Texas, los demócratas recurrieron a una de sus figuras emblemáticas: el ex presidente Bill Clinton para reforzar el llamado al voto en la zona sur del estado, donde el respaldo a la ola azul es mayoritario, aunque el segundo estado estadunidense con más presencia de mexicanos, se ha inclinado los últimos años hacia el respaldo republicano.
Clinton acompañó a los candidatos al Congreso, Henry Cuéllar, quien busca su reelección, y la joven latina Michelle Vallejo, que busca ocupar un asiento en la Cámara de Representantes.
El presidente número 42 de los Estados Unidos entre 1993 y 2001, pidió votar por su partido, al señalar que tiene la mejor oferta política para el futuro y pidió que los electores no apuesten por los republicanos como "muestra de protesta por la alta inflación porque esa afecta a todo el mundo y no solo a nuestro país".
Les pidió tener presente que el Partido Demócrata ha creado miles de nuevos empleos y apuesta por más y acusó a los republicanos de ofrecer lo que los gobiernos demócratas ya han conseguido.
"Si nosotros logramos la mayoría en la Cámara de Representantes vamos a seguir creando más empleos y a impulsar más apoyos en salud y educación", dijo durante un mitin en apoyo al congresista Henry Cuéllar, quien busca la reelección y mantener la posición para el partido azul en un estado mayoritariamente republicano.
Por la tarde, el ex presidente estuvo con la candidata Michelle Vallejo en la ciudad de Edimburgo donde el Partido Demócrata busca obtener más votos para intentar ganar más espacios legislativos.
A su vez, Henry Cuéllar pidió a sus seguidores reunidos en un centro de eventos sociales en Laredo, salir este martes a las urnas "y demostrar que el sur de Texas es azul".
Pero en Texas también se elige gobernador y las opciones están entre un tercer mandato del republicano Greg Abbott y el demócrata Beto O'Rourke, quien en 2020 se quedó a apenas tres puntos de arrebatarle el escaño al polémico senador Ted Cruz, conocido por sus duras posiciones en contra de los migrantes.
Abbott aprovechó el último día de campaña para reforzar sus propuestas políticas entre ellas, los logros obtenidos con el operativo Lone Star que buscó frenar la migración desde la frontera de Texas con México y que entre otras medidas obligó al traslado de miles de migrantes en autobuses hacia Washington y Nueva York para obligar al gobierno del presidente Joe Biden a responsabilizarse de lo que Abbott calificó como un fracaso migratorio.
En tanto, el demócrata Beto O'Rourke recibió el respaldo del ex presidente Barack Obama, quien le envió un mensaje de apoyo a 24 horas de las elecciones.
El ex mandatario aseguró que O'Rourke "regresará el sentido común y la decencia al gobierno de Texas. Por eso pido que votes por Beto y ayuden a construir la América que merecemos", dijo en su mensaje dirigido a los texanos.
Además, el demócrata acusó que Abbott "continúa fallándonos a todos, mientras pone su agenda extrema sobre la gente de Texas".
Por ello, ofreció restaurar la libertad reproductiva para las mujeres de Texas, mantener a los niños seguros en sus aulas, crear excelentes empleos, así como invertir en escuelas de clase mundial y ampliar la atención médica para que más personas puedan acudir a un médico.
"Juntos ganaremos el poder político, venceremos el extremismo de Greg Abbott y haremos que Texas avance para que todos puedan prosperar en nuestro estado".
El candidato demócrata estará este martes en San Antonio, Houston, Dallas y cerrará la jornada de este 8 de noviembre en su natal El Paso, en tanto que el gobernador Greg Abbott concluirá el día y seguirá los resultados desde McAllen.