Tras la detección de un presunto globo espía chino en el espacio aéreo de Estados Unidos, el secretario de Estado Antony Blinken pospuso su visita a Pekín, a pensar de que las autoridades chinas "lamentaron" la intrusión, según ellas "involuntaria".
"Hemos tomado nota de que China lo lamenta, pero la presencia de este globo en nuestro espacio aéreo es una clara violación de nuestra soberanía, así como del derecho internacional, y es inaceptable", afirmó un funcionario estadounidense que pidió mantener el anonimato.
Por lo tanto la visita de Blinken a Pekín, prevista para el domingo y el lunes, "se ha postergado" y será reprogramada cuando "las condiciones sean adecuadas", añadió.
Blinken se lo comunicó personalmente a las autoridades chinas, dijo el funcionario, quien aclaró que si se hubiera seguido adelante con el viaje esto "habría limitado muy seriamente" la agenda.
Washington aseguró la víspera que no tenía la más mínima duda sobre el origen de este gran aeróstato que volaba a gran altura, y ni sobre el hecho de que se usaba con fines de "vigilancia".
Inicialmente el gobierno chino pidió que no se exagerara el asunto pero el viernes acabó reconociendo que efectivamente se trata de un aparato procedente de China.
"Se trata de una aeronave civil utilizada para fines científicos, principalmente meteorológicos", declaró un vocero del ministerio de Relaciones Exteriores chino en un comunicado.
Debido al viento el globo "se desvió de su trayectoria", dijo, y añadió que su país "lamenta" que ingresara en el espacio aéreo de Estados Unidos por "una fuerza mayor".
Misiles nucleares
Actualmente el globo vuela "a una altitud muy por encima del tráfico aéreo comercial" y "no representa una amenaza militar o física para las personas en tierra", afirmó el jueves el vocero del Pentágono, Pat Ryder, en un comunicado.
Según medios estadunidenses, el globo sobrevoló las Islas Aleutianas, en el norte del Océano Pacífico, y Canadá antes de entrar en el espacio aéreo de Estados Unidos hace varios días.
Concretamente sobrevoló el estado de Montana, que alberga instalaciones de misiles nucleares, donde se movilizaron aviones de combate que se acercaron a él, informó un funcionario del Pentágono que pidió el anonimato.
Se decidió no derribarlo, debido a los riesgos que representan los posibles escombros para las personas en tierra, agregó, y consideró "limitada" su capacidad para recopilar información.
"Derriben este globo"
El gobierno canadiense agregó el viernes que investigaba un "potencial segundo incidente".
"Canadá toma medidas para garantizar la seguridad de su espacio aéreo, incluido el monitoreo de un posible segundo incidente", informó el ministerio de Defensa en un comunicado, sin entrar en detalles.
No es la primera vez que el ejército estadunidense registra una intrusión de este tipo pero en esta ocasión ha permanecido más tiempo en el espacio aéreo de Estados Unidos.
El incidente desató fuertes reacciones entre los políticos estadunidenses.
"Esta violación de la soberanía estadunidense, pocos días antes de la visita del secretario de Estado Blinken a China, muestra que las recientes señales de apertura" por parte de las autoridades chinas "no reflejan un cambio real de política", comentaron los jefes republicano y demócrata de una comisión parlamentaria sobre China, Mike Gallagher y Raja Krishnamoorthi.
"Derriben ese globo!", pidió el ex presidente republicano Donald Trump en su red Truth Social.
La visita de Antony Blinken a China habría sido la primera de un secretario de Estado estadunidense desde octubre de 2018, en un momento en el que las dos superpotencias intentan evitar que las tensiones entre ellas degeneren en un conflicto abierto.
Entre los muchos temas polémicos destaca Taiwán, que China considera parte de su territorio, y las actividades de Pekín en el mar de China Meridional.
LG