En España ya hay siete casos confirmados de la viruela del mono y 24 posibles en su capital, Madrid, se trata de hombres, los cuales, según la autoridad sanitaria, ninguno corre peligro e incluso se encuentran en sus respectivos domicilios porque no hubo necesidad de que fueran hospitalizados.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, confirmó que los primeros siete casos analizados por el Centro Nacional de Microbiología (CNM) de muestras tomadas a pacientes con sospechas dieron positivo y aclaró que no se trata de una enfermedad de transmisión sexual, sino que se propaga de animales a humanos.
Mientras que la Comunidad de Madrid elevó el número de sospechosos a 24 en la capital. El gobierno local lanzó una alerta respecto a esta enfermedad muy poco frecuente causada por un virus endémico de África central y occidental.
Pese a lo dicho por la CNM, la directora general de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, Elena Andradas, apuntó a que la transmisión se produjo por contacto con mucosas durante relaciones sexuales, aún cuando puede producirse por vía aérea.
Además, la autoridad madrileña dijo que todos son adultos jóvenes y que no hay ninguna mujer e incidió en que quienes sospechen de padecer la denominada viruela del mono deben contactar directamente con el sistema sanitario, especialmente si observan ciertos síntomas característicos de la enfermedad y similares a los de la viruela como son fiebre junto con la aparición de erupciones en la cara y el cuerpo.
La enfermedad suele durar de 2 a 4 semanas. El periodo de incubación de la viruela del mono suele ser de 7 a 14 días, pero puede reducirse a 5 y elevarse a 21 días.
España no es el primer país de Europa que registra casos de la viruela del mono, una enfermedad que suele provocar fiebre, mialgias, inflamación de los ganglios y erupción en manos y cara similar a la varicela.
Reino Unido dio la alarma el 15 de mayo, cuando lanzó una alerta sanitaria a la Organización Mundial de la Salud (OMS) tras detectar los cuatro primeros casos en Europa, que finalmente se han elevado a nueve. A ellos, se sumaron más tarde los cinco detectados en Portugal y los 23 de la Comunidad de Madrid.
La primera vez que la humanidad tuvo constancia de la viruela del mono en seres humanos fue en 1970 en la República Democrática del Congo (denominada en aquel entonces Zaire). En concreto, en un niño de nueve años que se encontraba en una región en la que la viruela se había erradicado en 1968.
Desde entonces, la mayoría de los casos notificados proceden de regiones rurales de la selva tropical de la cuenca del Congo y el África occidental, en particular de la República Democrática del Congo, donde se considera endémica. En 2017, Nigeria sufrió el mayor brote documentado, aproximadamente 40 años después de los últimos casos confirmados