A pesar de dos trágicos tiroteos en sus tiendas en menos de una semana, el gigante minorista estadunidense Walmart no tiene planes de dejar de vender armas y municiones, dijo el vocero del grupo Randy Hargrove el domingo.
"Estamos enfocados en apoyar a nuestros asociados, nuestros clientes y toda la comunidad de El Paso", Texas, dijo Hargrove, tras el tiroteo del sábado, que dejó 20 muertos.
Patrick Crusius, de 21 años, abrió fuego con un fusil de asalto en Walmart de El Paso apenas cuatro días después de que un empleado descontento matara a tiros a dos compañeros de trabajo e hiriera a un oficial de policía en una de las tiendas de la cadena en Mississippi.
Después del tiroteo en El Paso, el director ejecutivo de Walmart, Doug McMillon, publicó una nota en Instagram en la que afirma que "no puede creer" que ocurriera un segundo incidente armado en una semana en una de sus tiendas.
"Me duele el corazón por la comunidad en El Paso, especialmente los asociados y clientes del local 2201 y las familias de las víctimas", escribió. "Estoy rezando por ellos y espero que te unas a mí".
El fundador de Walmart y de Sam's Club, Sam Walton, amaba las armas, tanto que el fabricante estadunidense Remington le puso su nombre a un modelo de rifle de caza. Pero el gigante minorista sostiene que su público objetivo son los tiradores y cazadores deportivos.
Walmart ha realizado cambios en la política de venta de armas a lo largo de los años, como en 1993, cuando dejó de vender pistolas.
La compañía dejó de vender rifles semiautomáticos en 2015, y después del tiroteo en Parkland, Florida, en febrero de 2018, que dejó a 17 muertos en una escuela secundaria, Walmart aumentó a 21 la edad mínima para comprar armas y municiones en sus tiendas.
Además, "Walmart va más allá de la ley federal al exigir que todos los clientes entreguen una verificación de antecedentes antes de comprar cualquier arma de fuego", dijo Hargrove.
dmr