El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, comunicó ayer al primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, que su nueva propuesta para el brexit no le convence, durante una conversación telefónica con el premier británico.
“Mi mensaje a Johnson: seguimos abiertos, pero todavía no estamos convencidos”, escribió el político polaco en Twitter.
Johnson, por su parte, dijo que era su “propuesta final”. “No cumple con todo lo que hubiéramos deseado”, pero con esas “concesiones” hacemos “un verdadero intento de superar el abismo”.
El miércoles, el premier envió a Bruselas su propuesta para el brexit, que supone que Irlanda del Norte se mantenga alineada con las normas del mercado único tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE), pero solo para circular mercancías.
Además, esa provincia británica en la isla saldría junto con el resto de Reino Unido del espacio aduanero de la UE, lo que involucraría la instalación de controles fronterizos entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte.
Ayer, el grupo coordinador del brexit en la Eurocámara avisó de que el plan del premier británico “no aborda los problemas reales que deberían resolverse” sin un plan de salvaguarda en la isla de Irlanda.
La salvaguarda para evitar una frontera física entre ambas Irlandas, incluida en el acuerdo de salida pactado en 2018 entre Londres y Bruselas, no es aceptable para Johnson ni para una buena parte de diputados británicos, que han rechazado el pacto en el Parlamento de Westminster en tres ocasiones.