En medio de un entorno de incertidumbre y reducción de la actividad económica provocado por la pandemia de covid-19, Deloitte México consideró que con la reactivación de las actividades en los próximos meses se alcanzará un proceso de desarrollo y cambio de ciclo en las condiciones inmobiliarias, dirigido hacía el uso de tecnologías y esquemas de trabajo flexibles que detonarán en el sector una oportunidad de invertir en aquellos proyectos dirigidos a la transformación de ciudades inteligentes.
Durante su participación en el Foro Forbes Conecta Real Estate, Jorge Yarza, líder de construcción, hotelería y bienes raíces de Deloitte México, aseguró que las empresas que logren acercarse a sus clientes y entiendan la demanda de un entorno digital serán las que tengan mayores oportunidades en la transformación de ciudades que conviven aprovechando la tecnología, la sustentabilidad y convivencia.
“Esto nos dará la oportunidad de invertir en aquellos proyectos que hayan aprendido un esquema más flexible y con mayor calidad que simplemente hacer una oferta que no esté diferenciada. Aquellas empresas que tengan una estrategia para poder comunicarse con el cliente, esquemas de atención y entender el entorno digital serán las que tendrán mayores oportunidades y construir sobre esa lección con un ritmo más acelerado había ciudades inteligentes”.
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Agregó que la situación actual y el retorno a las actividades permiten que las compañías se adapten de mejor manera a las tecnologías y a un entorno laboral y educativo más flexible y accesible al mundo digital.
“Hay una serie de ajustes tanto al consumo como al proceso de inversión y la voluntad para invertir en bienes raíces y en ese contexto hay un conjunto de elementos que hay que ponderar como ventanas de oportunidad para realizar inversiones y tomar decisiones”, dijo Yarza.
Finalmente, reconoció que los estructurales económicos y demográficos del país a largo plazo son una ventana de oportunidad, toda vez que siendo un país joven se debe pasar de 30 millones de viviendas con hogares ocupándolos a cerca de 42 millones de viviendas y hogares en 15 años.
“México es un país que está en su proceso de evolución y que esto generará una demanda sostenida para los próximos 15 años para todos los segmentos industriales, residenciales, comerciales y de servicios turísticos en el mundo de inversión inmobiliaria producto de una necesidad”.
Es por esto que el experto señaló que es necesario contar con proyectos cada vez más inteligentes, que aprovechen la tecnología y que sean sustentables, pero es necesario contar con el financiamiento adecuado para el desarrollo de la oferta y facilitar la demanda al corto y largo plazo a través de esquemas hipotecarios.
srgs