La falta de compromiso de los trabajadores es uno de los principales desafíos que enfrentan las empresas en la actualidad, lo que en su mayoría se debe a las deficiencias en el tipo de liderazgo que se ejerce al interior de cada organización, dice Jon Clifton, director general de Gallup, una firma de asesoría especializada en análisis de big data de empleados, clientes, estudiantes y ciudadanos.
La gran mayoría de los trabajadores no se sienten comprometidos con su trabajo; 3 de cada 4 personas con un empleo están en esta situación a nivel mundial, mientras que en México la cifra aumenta 73 por ciento. “De hecho, los bajos niveles de compromiso laboral tendrán un costo de 8.8 billones de dólares este año, lo que equivale a 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial”, advierte Clifton.
¿Cómo se encuentra el bienestar de los empleados a nivel mundial?
En la medición mundial, 23 por ciento de las personas en el mundo dice sentirse comprometido con su trabajo, dos puntos porcentuales más en el comparativo anual y el nivel más alto desde que la firma comenzó a medir esta variable en 2009. Sin embargo, esto también significa que 77 por ciento no lo hace, y eso es realmente una preocupación para la humanidad, es un gran problema para la sociedad y las empresas. Es evidente que la humanidad está más cerca de colonizar Marte que de solucionar los problemas laborales.
La investigación de Gallup, sobre El estado del lugar de trabajo mundial 2023, revela que tener un trabajo que uno odie es peor que estar desempleado —y esas emociones negativas llegan al hogar, impactando relaciones y familia—. Si no estás prosperando en el trabajo, difícilmente lo harás en la vida en general. La falta de compromiso de la fuerza laboral es resultado de una gestión deficiente del capital humano en las empresas, lo que tiene repercusiones no solo en el terreno económico, sino también en el bienestar de los colaboradores y las personas que los rodean, ya que una mala gestión conduce a la pérdida de clientes y de ganancias, pero también a vidas miserables.
¿Qué pueden hacer las empresas para mejorar el ambiente laboral?
Deben de medir el bienestar de los empleados y mejorar sus prestaciones. Hay tres pasos a seguir; primero, tienen que capacitar a sus gerentes para que sean mejores líderes. Gallup descubrió que el gerente es responsable de 70 por ciento del bienestar de un empleado en el trabajo.
Hoy en día, las personas se convierten en jefes porque son expertos técnicos en lo que hacen, pero rara vez están capacitados para gestionar personas. Me pregunto si realmente ¿la gente sabe lo que se espera de ellos? Bueno, eso parece muy fundamental en términos administrativos, ya que imaginaríamos que todos los trabajadores sabrían que deben hacer en su puesto de trabajo. Según el estudio El estado del lugar de trabajo mundial 2023, 50 por ciento de los empleados no saben completamente lo que deben hacer todos los días en sus lugares de trabajo, y eso trae como consecuencia que la productividad laboral sea muy baja.
El segundo paso, es darles las herramientas necesarias para que realicen su trabajo de manera efectiva, tienen que escuchar a los empleados para saber qué necesidades tienen en su día a día.
El tercero es abrir las oportunidades de crecimiento a todos los trabajadores, hay empleados que pasan años en un mismo puesto, sin imaginar que tienen otras cualidades que las empresas pueden aprovechar en otras áreas. Las organizaciones tienen que abrir las oportunidades de crecimiento a los trabajadores, al final, la humanidad tiene fortalezas increíbles, pero es necesario colocarlos en puestos donde se permita que florezcan.
¿El agotamiento de los trabajadores incrementa el estrés?
La gente suele creer que el exceso de trabajo es el mayor factor de agotamiento, pero eso no es cierto. Es un factor importante, pero el más importante es la percepción de un trato injusto en el trabajo. Y este trato injusto suele ser el resultado de su superior. Si las organizaciones pueden mejorar la calidad de sus directivos, mejorarán significativamente el bienestar de sus trabajadores. El 80 por ciento de los empleados a tiempo completo dicen que disfrutan el trabajo que hacen, pero entonces ¿por qué solo 20 por ciento de los empleados prosperan en el trabajo? La razón no es el trabajo que hacen; es su lugar de trabajo. Si arreglamos el mal funcionamiento del mundo laboral, detendremos el aumento global de la infelicidad de la noche a la mañana.
¿Qué tan comprometidos están los mexicanos en sus empleos?
La gran mayoría de los trabajadores en México se sienten desconectados emocionalmente de sus empresas y no están comprometidos con su empleo; en esta situación se encuentran 73 por ciento de las personas y se debe a una gestión deficiente del talento.
Según nuestro informe, la proporción de la fuerza laboral mexicana que se siente comprometida con su empleo es de 27 por ciento, cuatro puntos por debajo del promedio de la región. De los 20 países que analizamos en América Latina y el Caribe, México está empatado en el número nueve con Chile. A nivel mundial, 23 por ciento de los trabajadores se encuentran en esta realidad.
¿Cómo afecta esta situación a las empresas?
En la parte práctica, cuando un trabajador ya no se siente comprometido con su trabajo, se presentan generalmente dos alternativas: desconexión o detracción. En el primer caso, conocido también como renuncia silenciosa; los empleados cumplen con lo mínimo requerido; se mantienen sentados mirando el reloj. En esta condición se encuentra 59 por ciento de los trabajadores de la región. En el segundo de los escenarios se ubican personas que ya están activamente desconectadas de su trabajo. Es una especie de renuncia estruendosa, pues su insatisfacción se traduce en acciones que buscan obstaculizar o dañar a la organización y sus metas. Bajo esta clasificación está 11 por ciento de la fuerza laboral latinoamericana.
Es muy importante, porque esa renuncia silenciosa o estruendosa tiene un costo, que estimamos se ubica en 8.8 billones de dólares anuales a nivel mundial. Cuando un colaborador no está comprometido, es probable que baje la calidad de su trabajo y esto afectará los resultados generales de las empresas.
En el caso de América Latina y el Caribe estamos hablando de cerca de 70 por ciento de las personas no traen la camiseta bien puesta con relación a su trabajo y esto tiene implicaciones, en específico una merma que se refleja en las métricas del negocio.
DJR