La lucha dentro de Nissan para llenar el vacío de liderazgo que dejó el arresto de Carlos Ghosn llevó a una guerra civil en el consejo de administración, mientras poderosas facciones internas luchan por el control del grupo japonés.
Surgió un distanciamiento entre el jefe del comité de nominaciones de Nissan y uno de los altos ejecutivos más influyentes de la compañía, de acuerdo con tres personas con conocimiento de la situación.
Se espera que el consejo de Nissan se reúna mañana para discutir, entre otros asuntos, el papel futuro de Hari Nada, el ex jefe legal que pasó de ser uno de los lugartenientes más cercanos de Ghosn a uno de los cabecillas de la indagatoria.
A pesar de firmar un acuerdo con los fiscales japoneses, aumentan las preguntas de los ejecutivos de Nissan y Renault, su socio francés, sobre por qué a Nada se le permitió seguir participando en la investigación sobre Ghosn en los últimos meses. La presión para su remoción es generalizada.
Masakazu Toyoda, el ex funcionario del Ministerio de Comercio japonés que dirige el comité de nominaciones de Nissan, y Hitoshi Kawaguchi, el ejecutivo a cargo de las relaciones gubernamentales que desempeñó un papel fundamental en los meses previos a la destitución de Ghosn, libran una batalla sobre quién debería encabezar el grupo.
Antes de una decisión a finales de mes, las discusiones sobre el nuevo jefe se centran en tres candidatos, entre ellos Yasuhiro Yamauchi, ex director de operaciones y director ejecutivo interino.
Se había considerado a Yamauchi como alguien confiable debido a su experiencia y por ser miembro del consejo de administración de Renault. Los funcionarios de Nissan en el círculo inmediato de Kawaguchi estaban a favor de Yamauchi como director ejecutivo interino para reparar las relaciones con Renault.
Pero Toyoda expresó sus reservas sobre Yamauchi como CEO permanente, citando preocupaciones sobre su capacidad de gestión y sus recientes interacciones inestables con Renault, dijeron dos de las personas.
Una persona cercana a Kawaguchi negó que apoyó a Yamauchi para el puesto de CEO. Toyoda no quiso hacer comentarios.
El distanciamiento puso en el centro de la atención a Kawaguchi, el jefe de comunicaciones globales conocido por sus estrechos vínculos con el gobierno japonés y temido por los ejecutivos por su amplia competencia en asuntos de gestión. “No se debe subestimar su influencia tras bambalinas”, dijo una persona que trabajó con él durante más de una década.
Los otros candidatos principales para el puesto de CEO son Jun Seki, el ex jefe de Nissan en China a cargo de su plan de cambio de rumbo, y Ashwani Gupta, un ex ejecutivo de Renault nacido en India y considerado una estrella en ascenso dentro de Nissan.
El enfoque en estos individuos aún podría cambiar, advirtieron estas personas, ya que el comité de seis miembros busca conciliar las diferencias entre los intereses de los ejecutivos de la compañía de la vieja guardia, su mayor accionista Renault y sus influyentes directores externos.
El perfil del elegido
Las crecientes tensiones señalan el reto de encontrar un CEO con mentalidad internacional y con habilidades administrativas y diplomáticas para detener el desplome de las utilidades y manejar una posible fusión global de cuatro vías con Fiat Chrysler Automobiles y los socios de la alianza Nissan y Renault y Mitsubishi.
Nissan concluyó recientemente una investigación interna de 10 meses de duración sobre las finanzas de Ghosn, quien fue arrestado y se le acusó de mala conducta financiera. El ex presidente niega todas las acusaciones.
Figuras de alto rango dentro de Nissan, entre ellas la ex jefa de auditoría Christina Murray, cuestionaron por qué la investigación no analizó el papel de Nada y otros ejecutivos, de acuerdo con una persona con conocimiento de la investigación interna.
Nada no respondió a una solicitud de comentarios. Nissan dijo que cree que la investigación se realizó de manera “rigurosa y adecuada”.
Con información de Leo Lewis, Peter Campbell y David Keohane
MRA