Rappi comenzó un programa piloto de entregas con robots en Colombia y espera extenderlo a otros países, como respuesta a la crisis de contagio del coronavirus, que obligó a los gobiernos alrededor del mundo a decretar el confinamiento de millones de personas para frenar el contagio.
La cuarentena ha llevado a que las entregas a domicilio se disparen en los países afectados con el covid-19, en donde las actividades de trabajo y estudio se han concentrado en casa y a la vez ha provocado una fuerte caída en las ventas en sector comercial, que amenaza con llevar a la quiebra a muchas empresas.
- Te recomendamos Rappi entregará comida gratis a 500 mil enfermeras y médicos ante Covid-19 Negocios
Solo Rappi, que tiene unos 200 mil repartidores en nueve países de América Latina, informó que ha tenido un aumento del 30 por ciento en las entregas en el primer bimestre del año, en comparación con los últimos dos del año previo, antes de que se intensificara el brote del virus.
El piloto inició esta semana en la ciudad de Medellín con robots que cuentan con capacidad de 35 centímetros cuadrados, transportan exclusivamente domicilios de restaurantes con pago por medios digitales, en recorridos de última milla y son desinfectados antes y después de cada una de las órdenes, dijo Rappi en un comunicado.
Los robots son operados de manera conjunta entre Rappi y KiwiBot, empresa colombiana basada en los Estados Unidos.
"Tenemos la convicción que de la mano de la tecnología podremos seguir aportando a nuestro objetivo de hacer más fácil la vida de las personas, de manera segura, especialmente en coyunturas como esta en la que nos encontramos", dijo Matías Laks, gerente de Rappi para Colombia.
La compañía reveló que en la zona de Medellín en la que se está realizando las pruebas, se han efectuado cerca de 120 pedidos diarios con 15 robots.
GGA