Qué experiencia tan más nefasta es darle seguimiento a una serie en “streaming”.
¿Por qué? Porque no existe el más mínimo respeto para el cliente.
Le explico: una cosa son las películas. Otra, las series. Y otra todavía más complicada, las miniseries.
Cada uno de estos formatos tiene sus características y su propio esquema de distribución.
Problema número uno: cuando estamos viendo algo en la plataforma que usted quiera, guste y mande, difícilmente sabemos si se trata de una película, de una película dividida en varias partes, de una serie o de una miniserie.
A esto súmele que es groserísimo que cuando uno está mirando algo dividido en partes o en episodios, no sepa si son dos, cuatro, siete o diez.
¿Y qué me dice de ese insulto que es que cuando uno quiere comenzar a mirar un título, desconozca si le van a subir los capítulos a un ritmo de uno por semana o si los va a tener todos de un jalón.
Todo lo que le estoy diciendo suena como muy estúpido, pero no lo es. Usted y yo necesitamos saber a qué nos estamos enfrentando para organizar nuestro tiempo.
No, pero espérese. Se pone peor: hablemos de distribución.
Yo aquí le podría escribir ese libro que las editoriales no me quieren aceptar, pero no lo voy a hacer perder su tiempo. Seré breve. Me voy a ir directo a las series.
Una serie, por definición, sale una vez al año y, si funciona, regresa 12 meses después.
Esto tiene una lógica tanto en los tiempos de producción y promoción, como en lo más importante de todo: la creación de hábitos en las audiencias.
¿Qué están haciendo prácticamente todas las plataformas que existen en el mercado? En un descaradísimo abuso de poder parten y vuelven a partir temporadas a su antojo y las programan cuando se les da la gana como para tenernos ahí, a su merced.
¡Perdón! Uno no tiene la obligación de atender a los sistemas de distribución de contenidos en línea. Estamos pagando. Ellos tienen la obligación de atendernos a nosotros.
¿Cuál es el problema de esto que le estoy comentando? Más allá del infierno que debe ser para los productores trabajar bajo este insólito esquema, que a uno se le quitan las ganas de ver las cosas.
Lo he vivido muchas veces, con muchas marcas, pero me acaba de volver a pasar y como veo que nadie dice nada, ahora sí voy a denunciar:
Mi familia, toda, era la más fanática, la más entregada, la más admiradora de la serie mexicana “Lalola” de VIX.
No hay manera de hacerle entender a los creadores de este concepto el profundo agradecimiento que sentimos, como familia, por todas las horas de diversión que pasamos juntos, riquísimo, mirando la primera temporada frente al mismo monitor.
¡Pues qué cree! Se acaba de estrenar la temporada dos y yo no sé si fue la fecha, la ausencia de una promoción más allá de la que tuvimos en “La casa de los famosos México”, la estrategia o la falta de un buen resumen de la primera temporada, pero cuando nos organizamos para encerrarnos a verla, juntos, no conectamos.
La comenzamos a ver y ya no se nos hizo novedosa. Ya no nos dio risa. Tuvimos que volver a poner la temporada uno para ver si enganchábamos, pero no funcionó.
Yo me tuve que ir a otro lado, solo, a verla porque ése es mi trabajo y no acabé. No sentí la necesidad de acabarla. No había nada que me motivara a llegar al final.
¿A usted le pasó lo mismo? ¿Le ha pasado con algún otro contenido? ¿Está de acuerdo en seguir jugando a “segunda parte de tres de la temporada equis” y a todos esos excesos? ¿Se lo perdonaría a la televisión tradicional?
Tenemos mucho qué discutir porque tarde o temprano esto va a colapsar. Para recibir estímulos a destajo tenemos las redes sociales. Para darle seguimiento real a algo le pagamos a estas compañías.
Lamento mucho mi experiencia con “Lalola”. Prometo acabarla algún día. Cuando tenga tiempo.
Como no he llegado al final desconozco si acaba en la temporada dos o si va a llegar a la tres, a la cuatro o a la nueve.
No es personal contra “Lalola” o contra VIX. Pasa mucho en casi todas partes. Insisto. No se vale.
¿Qué piensa usted de lo que le estoy diciendo? ¿Me volví loco, exagero o no?
Mientras recibo sus comentarios a través de las redes sociales, vea “Lalola” en VIX. Es un estreno importante. ¿A poco no?