El sábado 7 de septiembre tendrá lugar en el Teatro Degollado la ceremonia de entrega de los Arieles 2024 y me sorprende que los medios tradicionales de Guadalajara no hayan aprovechado la oportunidad para publicar todo tipo de notas, comentarios y entrevistas que hubieran creado suspenso y difundido el importante festejo. La ceremonia que premia lo mejor del cine mexicano interesa y emociona a los cinéfilos del país e involucra, desde luego, a los que trabajan o están, de alguna manera, ligados o interesados en el campo audiovisual y la industria cinematográfica. Que la ceremonia haya salido de las ciudad de México y se lleve a cabo por segunda vez en el Teatro Degollado nos llena de orgullo y expectativa. La noticia con la lista de nominados que se publicó hace unos meses, había llamado la atención de los medios pero se acerca la fecha y no me parece sentir la “fiebre del Ariel” y la cuenta regresiva que suelen despertar el suspenso y la curiosidad acerca de un evento deportivo, un concierto de un músico conocido o una exposición importante. ¿Pero porqué será que en este segundo año de la importante fiesta del cine mexicano se note menos movimiento? ¿Será que la ceremonia se cubrirá por los medios de la capital y se trasmitirá en vivo por el canal 22 de televisión? Esto significa que el equipo técnico vendrá de CdMx, que los presentadores muy probablemente serán de la capital y que nuestro Degollado y los entusiastas cinéfilos tapatíos se darán cuenta de los preparativos muy pocos días antes de la importante fiesta del cine. Hace un año la ceremonia, alegre y de buen ritmo, rindió homenaje a la cultura y música jalisciense. Ojalá así sea también en esa ocasión.
Lo que se manejó con mucho tino desde la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas AMACC, IMCINE y la Secretaria de Cultura, fue la difusión de las películas nominadas los fines de semana a partir del fin de junio y hasta la fecha de la ceremonia. A través del programa “Rumbo al Ariel 2024” con una plataforma a la que había que registrarse, pudimos ver la mayoría de las películas nominadas, el canal 22 de televisión abierta dedicó espacios a los cortometrajes mientras que a la Cineteca y el Cineforo de Guadalajara llegaron películas que no se habían exhibido previamente. Una característica atractiva de los Arieles de la AMAAC es la lista de secciones que nos recuerda que la creación y producción de películas es un arte que se realiza en equipo y que incluye profesionales de muy distintas disciplinas. Es un gran acierto que se dediquen secciones a Mejor Opera Prima, Mejor Revelación Actoral y Mejor película Iberoamericana. Al igual que el premio Oscar, el Ariel también distingue entre los distintos tipo de cortometrajes ya que premia al Mejor Cortometraje de Ficción, Mejor Cortometraje Documental y Mejor Cortometraje de Animación.
Como docente y critica de cine pienso que el hecho de que la ceremonia de entrega de los premios Ariel se haya llevado a cabo dos veces en Guadalajara abonará al cine jalisciense, tanto en los que concierne la producción como la difusión y exhibición. También la realizadora Isabel Cristina Fregoso, ganadora de un Ariel para su documental Chenahlo (2001) considera “que sea en Guadalajara se me hace muy importante, muy bueno para los jaliscienses y sería buenísimo que fuera distinto en cada ciudad y tuviera repercusión en el cine local”. También Karla Castañeda, ganadora de Arieles para sus cortometrajes de animación Jacinta (2008 ) y La noria (2012), comenta que le parece muy bueno que la entrega del Ariel “no esté centralizada y que existan miradas puestas en Jalisco”. En cuanto a lo que significa para una realizadora recibir un Ariel, las dos realizadoras acentúan que el Ariel fue muy importante para su vida y carrera. Karla comenta, además, que “es lindo recibir un premio en casa, es un premio al esfuerzo, la dedicación y a la constancia”. Isabel Cristina opina que “es un reconocimiento muy hermoso por parte de la academia ya que reconoces tu trabajo. Y es tanto el esfuerzo que se hace para crear cine independiente y además historias que tengan cierta profundidad y empatía con el público, que el premio a los creadores me parece muy relevante”.
Acompañemos por televisión o, si tenemos suerte, en el Degollado, a “nuestros” nominados de Jalisco: Lorena Padilla y su opera prima Martínez, Rita Basulto y su cortometraje de animación Humo, Fanie Soto y su cortometraje de ficción Patrona, Lucía Bayardo y su cortometraje de animación La vieja y el cuervo y Mario Martínez nominado por Mejor Sonido para el largometraje Todo el silencio. Enhorabuena al cine jalisciense con los premios Ariel.