“La imaginación es más importante que el conocimiento”. – Albert Einstein
¿Cuándo fue la ocasión más reciente en la que tuviste, lo que podrías llamar, una gran idea? No importa el contexto, sino el hecho de haber tomado conciencia de qué eso que recién pensaste es atípico en ti. Date unos segundos y luego regresa a leer. Es importante.
Cuando hablamos de estructurar equipos de alto rendimiento, en ocasiones se parte del desempeño y el grado de efectividad en los resultados como condición para pertenecer a ellos.
Yo a estos les llamo equipos SWAT, y sí, me estoy apropiando del concepto de la serie, y ni modo. Pero cuando hablamos de alta dirección, los conceptos mencionados ya no están en el top tres, sino que aparecen otros como coordinación, visión, y (por supuesto) imaginación.
Y aquí aclaro: imaginación no es igual a creatividad. Imaginar, es un proceso que implica la capacidad de salirse de los límites que establece un marco operativo.
Por su lado, Creatividad es la aplicación de recursos en tareas concretas, dirigidas a conseguir lo que se imaginó. Steve Jobs, Elon Musk y Mark Zuckerberg, podrían considerarse, sin duda, como personas altamente imaginativas, y al compartir su visión, provocan la creatividad en sus equipos.
Ahora sí, regresemos a la pregunta y dime: ¿qué resultados obtuviste con esa gran idea? ¿O fue otra más, de esas que están destinadas a perderse en las sombras de las oportunidades perdidas?
Te lanzo el reto de romper paradigmas, a “salir de la caja”, darte un “refresh”, y a renovar tu estilo de gestión usando la siguiente fórmula de dirección: imaginación + coordinación = resultados extraordinarios.
Cierro parafraseando a Mario Borghino: “Para encontrar soluciones, es necesario cambiar de realidad”. Hay que atreverse a romper paradigmas. ¿Te avientas?