Gestión urbana

Ciudad de México /

En México nos quejamos, con razón, de la falta de concursos que sustenten decisiones urbanísticas y de obra pública. En parte lo escasamente democrático de nuestra gestión del espacio urbano es la carencia de planificación adecuada. La capital del país y sus principales ciudades como Guadalajara, Puebla y Monterrey, crecieron exponencialmente durante la segunda mitad del siglo XX, debido al desarrollo inmobiliario de iniciativa privada, no por un acto estatal de planeación.

La fórmula del crecimiento urbano nacional se explica de modo sencillo: la población comenzó a migrar masivamente del campo a la ciudad debido principalmente a la industrialización, los terratenientes de las inmediaciones de las ciudades comenzaron a urbanizar sus terrenos para ofrecer casas a los nuevos pobladores, el Estado apoyó a las compañías privadas con infraestructura, vías de comunicación y medios de transporte público, quienes no pudieron conseguir casa, se asentaron irregularmente y así nacieron nuestras metrópolis.

Quizá por esta razón, hoy en día, cuando el gobierno inicia algún proyecto de equipamiento importante a nivel metropolitano, con frecuencia recurre a los métodos y medios económicos de la iniciativa privada, los cuales suelen ser discrecionales y por definición antidemocráticos.

Huelga decir que en nuestro país es muy poco frecuente ver algún plan maestro coherente y sustentado por los estudios e ingenierías necesarias, tanto gubernamental, como por parte de los promotores privados. Quizá por sus sistemas viales sin intersecciones de tráfico, los desarrollos modernos que fueron mejor planteados durante el siglo XX hayan sido la Ciudad Universitaria, Ciudad Satélite y Cancún, curiosamente en los tres casos se trata de un tipo de plan de supermanzana, en el que se segrega el tráfico vehicular del peatonal.


Tangente

Diseño de sistemas viales giratorios

El concepto urbanístico de supermanzana deriva del diseño de sistemas viales giratorios, inventados por el ingeniero alemán Hermann Herrey en el siglo XIX. En México fueron utilizadas en numerosas ocasiones por urbanistas como Domingo García Ramos, José Luis Cuevas y Carlos Lazo.

  • Lorenzo Rocha
  • arquitectonicos@gmail.com
  • Arquitecto mexicano y maestro en teoría crítica. Su interés se centra en el uso experimental del espacio. Autor de los libros Arquitectura crítica y Comunidad en obra, el más reciente.
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS