Los límites de la planificación urbana y del diseño arquitectónico se han ampliado significativamente durante las últimas décadas. A medida de que el crecimiento de las metrópolis ha excedido las posibilidades sostenibles de su expansión en el territorio, los planes y proyectos oficiales se han ido convirtiendo en letra muerta y el desarrollo inmobiliario ha quedado en manos privadas.
Podríamos afirmar que las instituciones públicas ocupadas en la gestión del territorio se han puesto al servicio de los intereses económicos de las grandes corporaciones. Donde haya posibilidades de inversión, nuevos servicios y creación de empleos, el Estado dará todas las facilidades para la realización de los proyectos privados.
En este contexto, la transformación urbana ha dejado de ser un fenómeno arquitectónico-urbanístico. La gran mayoría de los cambios que se verifican en los ámbitos urbano y territorial son de tipo cualitativo.
Las grandes ciudades han cambiado relativamente poco en términos morfológicos, la mayor parte de los cambios son sociales. Lo urbano, que según sabemos es “la ciudad menos su arquitectura” ha sido el campo más fértil para las revueltas sociales más recientes y también para las transformaciones graduales e imperceptibles en la composición social de los barrios nuevos e históricos.
En Ciudad de México, el aburguesamiento de muchas zonas que antaño eran populares, como las colonias Atlampa, Tabacalera, Obrera, Anáhuac y muchas otras más, ha provocado desplazamientos hacia las periferias donde los alquileres y servicios son menos costosos. Sin embargo, la lógica del mercado inmobiliario es capaz de encontrar oportunidades para hacer negocios incluso en los municipios periféricos como Ecatepec, Nezahualcóyotl, Ixtapaluca o en el Valle de Chalco. De este modo las dinámicas contemporáneas de desplazamiento social no conocen límites al exterior ni al interior de las trazas urbanas.
TANGENTE
Conservación
La Oficina de Transformación Urbana, fundada en Milán por el artista Bert Theis en 2002, comenzó a operar en Ciudad de México en 2004 dirigida por el autor de la presente nota, se ocupa de la conservación de casas históricas en la colonia Santa María la Ribera.