Para la tradición yóguica, el ser humano es un reflejo del universo, donde la máxima hermética de lo que es afuera es adentro cobra absoluto sentido. Y el universo vibra y tiene la capacidad de expandirse y contraerse, igual que nuestra energía y conciencia.
La palabra sánscrita spanda deriva de la raíz spadi, que significa “moverse un poco”. Con ella se alude a la pulsación primordial o vibración creadora en todo el universo, desde lo más pequeño a lo más grande; al continuo flujo cíclico similar al de nuestra respiración acompasada por el ritmo de la inhalación y exhalación, o al de la vida y la muerte.
Entender que “vivimos en una red energética sutil en constante cambio, donde todo está o en estado de expansión o de contracción, donde bailan los contrarios y se influyen mutuamente”, puede darnos la calma para fluir con el constante devenir de la existencia.
De hecho, en el ser humano, Spanda captura esta dimensión en un nivel más profundo que constituye la realidad interna más elevada del ser. Es la sagrada vibración del corazón.
En la vida diaria se puede experimentar como entusiasmo o un intenso impulso interno, mientras que la ausencia de esta experiencia causa apatía, desconfianza, inercia. Hace que el individuo se torne ineficaz y carezca de centro. Spanda devuelve la habilidad para centrarse de forma natural en el corazón y recuperar el gozo de la vida. En esencia, es despertar al estado de asombro y deleite sutil.
En la práctica de yoga es importante aprender a fluir con los estados expandidos o contraídos, a través de la respiración y el Prana, o la energía vital: Inhalando y observando la expansión; exhalando y observando la contracción; y penetrando en el vacío y la inmovilidad de los espacios en medio, para encontrar el equilibrio.
En la práctica de asanas, los movimientos de expansión se hacen con la inhalación como en el caso de Salabhasana, la postura de la Langosta, en la que el pecho se abre por la posición de forma natural. Los movimientos de contracción como las torsiones o como Uttanasana, la postura de la Pinza, en la que el pecho se contrae, se hacen acompañados de la exhalación. Es importante identificar cómo se mueve la energía y la conciencia sea expandiendo el cuerpo o contrayéndolo.
“Cuando uno está establecido en el principio supremo de Spanda (vibración, conciencia pura) controlando la emergencia y la desaparición del universo (el movimiento), se convierte en quien verdaderamente disfruta (de sí mismo en todo) y en el Señor de los Chakras (Shaktis)”. Spanda Karika.
(Con información de hridaya-yoga.com, holisticyogatherapy.org y yogaesmas.com)
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