En esta mi última colaboración del 2024, además de agradecer al lector por su atención y a Milenio Puebla por el espacio para poder compartir con ustedes, deseo de todo corazón que las últimas del año sea semanas de bendición y que el 2025 inicie con parabienes para cada familia.
Ayer, con el inicio de las nueve posadas comenzó la recta final de este 2024, pasando por la Nochebuena y la Navidad la próxima semana, para que exactamente en dos martes estemos despidiendo el año y dándole la bienvenida al que inicia.
En lo personal y como siempre lo sugiero en mis pláticas y en la consulta, es momento de dar gracias por todas las bendiciones recibidas en este año que está por terminar, incluyendo aquellas que vinieron en forma de sorpresas e incluso las que traían una presentación más bien como de problema o aprendizaje, mismas que nos dieron también buenas lecciones y crecimiento.
Les propongo que desde hoy y hasta el martes 31 cada día demos gracias por algo recibido, aprendido, logrado o vivido en este 2024, con lo cual, la gratitud nos permitirá cerrar bien este ciclo calendario y nos abrirá las puertas de todas las posibilidades para el año próximo.
Estamos por recibir al 2025, se fue un cuarto de siglo de este milenio y aún recuerdo cuando íbamos a darle la bienvenida al tan esperado año 2000, en torno al cual se hicieron todo tipo de mitos, predicciones y estigmas, por lo que quienes hemos tenido la bendición de vivir estos 25 años, con toda la globalización y tecnología que hoy domina el planeta, sólo deseamos paz, salud y armonía para la humanidad en los días venideros.
Hay mucho que agradecer en este 2024 y también mucho que intencionar para el 2025.
Vayan mis mejores deseos llenos de bendiciones y gratitud.