Ha llegado una de las semanas más esperadas del año, cuando una edición más de la Presidents Cup se lleve a cabo esta semana en el Royal Montreal Golf Club en Canadá, donde el equipo Internacional juega como anfitrión. Recordemos que de 14 ediciones celebradas hasta la fecha el equipo Americano ha ganado 12, con un empate y una victoria del equipo Internacional, en esta justa bianual que se formó por iniciativa del ex presidente norteamericano George Bush.
La realidad es que en el papel el equipo del capitán Jim Furyk luce mucho más fuerte, empezando por el número uno del mundo, Scottie Scheffler, quien el solo tiene más victorias este año que todo el equipo Internacional.
Y qué decir del dos del ranking mundial, Xander Schauffele, quien esta temporada se llevó dos majors.
La única gran ventaja que veo a favor de los Internacionales es que están jugando en Canadá, donde el local Mike Weir es un héroe nacional, además de contar con la gran experiencia de sus vicecapitanes que incluyen a Ernie Els y al colombiano Camilo Villegas, quienes sabrán inyectar sus conocimientos a los jugadores.
Cada equipo tiene 12 jugadores, de los cuales seis entran de forma directa por ranking y los otros seis son elegidos por los capitanes. Son tres días de competencia, por la mañana cuatro parejas de cada equipo en formato four ball (bola baja) y por la tarde en formato best ball (golpes alternos) para el domingo jugar 12 partidos individuales en formato match play (juego por hoyos).
Como mencioné, los americanos tienen a Scheffler y Schauffele, además de Morikawa, Keegan Bradley, Cantlay y Finau. Las cartas fuertes del equipo Internacional son: Adam Sott, Hideki Matsuyama, Jason Day y Tom Kim.
El único mexicano en participar en una Presidents Cup es Abraham Ancer en 2019, donde fue el mejor de su equipo con tres victorias, un empate y una sola derrota que vino a manos del ex número del mundo, Tiger Woods, quien en el último hoyo de su match le dio la mano a Abraham cuando todavía la pelota no llegaba al hoyo, algo que me parece hasta la fecha fue bastante
innecesario.