La culminación de la tercera transformación de nuestro país, fundó instituciones que han trascendido a lo largo de la historia. Una de ellas es elInstituto Mexicano del Seguro Social.
Así comenzó su mensaje la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en la 115 Asamblea General del IMSS que se celebró el viernes pasado en Palacio Nacional.
Y en efecto, el Seguro Social es producto de la lucha revolucionaria, de la búsqueda de mejores condiciones para las y los trabajadores de México. Sin embargo, en la primera Asamblea General que me tocó encabezar en 2019, el IMSS venía de enfrentar lo que la Presidenta ha planteado como el desvirtuamiento de las instituciones públicas que lo llevó a una crisis que puso en riesgo su viabilidad y debilitó su capacidad operativa en detrimento de sus propios trabajadores y sobre todo, de sus pacientes.
En ese entonces, planteamos que el IMSS de la Cuarta Transformación habría de equilibrar la salud financiera con la salud de la derechohabiencia y combatir el tiempo que se dejó de invertir en equipos, en infraestructura, en personal y en mejorar los servicios.
Así lo hicimos y así lo informamos ante la Presidenta: Hoy tenemos un IMSS con registro histórico de 22.6 millones de trabajadores afiliados, un IMSS que invirtió $61 mil millones de pesos para rehabilitaciones mayores de hospitales y Unidades de Medicina Familiar, un IMSS con 60 mil trabajadores de la salud más que en 2019.
Un IMSS que forma a más especialistas, un IMSS que ha construido más hospitales que en cualquier otro sexenio, un IMSS con la mayor inversión en equipamiento médico de la historia, un IMSS que se ha actualizado y ya tiene 53.2 millones de expedientes clínicos digitales.
A la Asamblea acudieron secretarias y secretarios de Estado, 10 de ellos en su calidad de asambleístas representantes del gobierno, nos acompañaron 10 gobernadoras: Tere de Aguascalientes, Layda de Campeche, Maru de Chihuahua, Indira de Colima, Libia de Guanajuato, Evelyn de Guerrero, Delfina del Estado de México, Mara de Quintana Roo, Lorena de Tlaxcala, Rocío Nahle de Veracruz y la Jefa de Gobierno Clara Brugada.
Además, 11 gobernadores: Baja California Sur, Coahuila, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Zacatecas y también el de la entidad que nunca volverá a ser la última; Eduardo Ramírez Aguilar del Estado Libre y Soberano de Chiapas.
También estuvieron presentes los integrantes de la Fundación IMSS, el equipo del sector salud, empresarios, representantes sindicales y por supuesto, no podía faltar la gran Familia IMSS representados por sus característicos uniformes.
En esta Asamblea se habló de la profundidad de la invitación que nos ha hecho la Presidenta Claudia Sheinbaum: Escribir Presidenta con A, doctora con A, ingeniera con A. No sólo es una letra, es resignificar la historia.
Por eso, propuse que en esta extraordinaria oportunidad que tengo de continuar al frente del IMSS, en el 2o piso de la 4a Transformación, es tiempo de escribir el IMSS con A.
Un IMSS autocrítico, que escucha y aprende, que acude al llamado y resuelve, que sufre el dolor ajeno y sueña con repararlo. Cómo lo soñó y escribió una directora de Prestaciones Sociales del IMSS que luego se convirtió en la primera gobernadora que tuvo México, Griselda Álvarez Ponce de León:
No podemos sentarnos
y ver cómo crece la angustia.
No vamos a reconstruir el llanto
No aceptamos la tarea de morir.
Tenemos, todavía, algo que decir
Y yo diría: Mucho por hacer.
Por su parte, la Presidenta cerró su discurso: Esta noble institución del pueblo de México y de la nación, en su himno dice: “El águila, una madre y su regazo son símbolos de amor indeclinable, a un pueblo que avanza infatigable con rumbo al porvenir, nunca al ocaso”.
Eso es México, siempre rumbo al porvenir.