La Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA) del T-MEC documentó la mortalidad de al menos mil tortugas caguama (Caretta caretta) cada año, causada por la interacción con la actividad pesquera en el Golfo de Ulloa en Baja California Sur. Lo anterior, forma parte del primer Expediente de Hechos, publicado en virtud del nuevo acuerdo comercial, por el que el gobierno mexicano debe responder por las omisiones en la aplicación efectiva de la legislación ambiental relativa a la protección de los quelonios, además de que podría recibir una serie de recomendaciones por parte de la comisión.
“La información examinada por el Secretariado (de la CCA) para la preparación del expediente de hechos evidencia que el varamiento de quelonios ha sido documentado como un fenómeno recurrente, y que generalmente las tortugas marinas están sujetas a diversas amenazas, aparte del enmallamiento en redes de pesca. Una de esas amenazas es la hipotermia, condición que puede aumentar el riesgo de colisión con embarcaciones o de sucumbir ante predadores y también ocasionar, por ejemplo, que el organismo se vuelva vulnerable a enfermedades infecciosas y finalmente muera”, indica el documento de 150 páginas.
Este 22 de abril, el Secretariado de la CCA publicó el expediente de hechos referente a la petición SEM-20-001, que presentaron el 17 de diciembre de 2020, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) y el Centro para la Diversidad Biológica, en la que se asevera que México omitió la aplicación efectiva de la ley ambiental en relación con la conservación de la tortuga caguama (Caretta caretta) en el Golfo de Ulloa en Baja California Sur, a pesar de que en 2018 se decretó un área de refugio para la especie.
“Este es un paso significativo para responsabilizar al gobierno mexicano por su falta de protección a las tortugas caguama. Miles de estas criaturas en peligro de extinción han muerto en los últimos años debido a que quedaron atrapadas en redes de pesca. Con el nuevo acuerdo comercial tripartito en vigor, las autoridades mexicanas deben actuar y explicar su inacción para prevenir esta mortandad. Además, Estados Unidos debe solicitar consultas con México por no cumplir con sus obligaciones ambientales para proteger la vida marina bajo el acuerdo comercial”, dijo Alejandro Olivera, representante del Centro para la Diversidad Biológica en México.
Como parte de su investigación, en julio de 2023, el Secretariado realizó una visita de campo a la playa San Lázaro, frente a la comunidad de Puerto Adolfo López Mateos, municipio de Comondú, donde detectó al menos, los restos de 4 ejemplares de tortugas caguamas en avanzado estado de descomposición; dos con el estómago de fuera, y dos más con marca del censo de una organización local.
“Dos de los especímenes de caguama observados varados en la playa durante el recorrido de campo del Secretariado, se encontraban en avanzado estado de descomposición. En ambos casos, el estómago de la tortuga salía de la boca, lo cual es característico cuando la muerte ocurre por ahogamiento”.
De acuerdo con el expediente, durante esa misión, el personal del Secretariado viajó a La Paz para sostener reuniones con funcionarios de Profepa, Inapesca y Conapesca; a la que no llegaron los representantes de la Semarnat y la Conanp. El documento también revela el gobierno mexicano, pidió al Secretariado, canalizar todas sus solicitudes de información a través de la Unidad Coordinadora de Asuntos Internacionales (UCAI) de la Semarnat, pero no obtuvieron respuesta; por lo que el Secretario contrató a una empresa para presentar solicitudes de información vía la Plataforma Nacional de Transparencia.
De acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), se registraron más de 200 tortugas caguama muertas en 2012, 2013, 2018, 2019 y 2020, según arrojan los datos sobre varamientos. Por cuanto a la presentación ante la FGR de denuncias en materia penal como consecuencia de la muerte de ejemplares de tortuga caguama en el golfo de Ulloa, BCS, el Secretariado no encontró información al respecto.
En lo concerniente al número de recorridos de inspección y vigilancia realizados por la Profepa, el Secretariado encontró que en 2010 se realizó una inspección; 287, en 2013 (año en que casi mil tortugas caguama se encontraron varadas en la playa San Lázaro), y 399, en 2014. A partir de 2015, el número de recorridos de inspección realizados por la Profepa comenzó a disminuir
Las organizaciones acusaron que la alta mortandad de las tortugas caguama en Golfo de Ulloa, asciende a por lo menos tres mil muertes en los últimos siete años. A pesar de que existen indicios de que las redes de pesca provocan esta situación, las autoridades mexicanas no han podido determinar la causa principal, por lo que presentaron una petición ante la CCA para que investigara esta situación.
“Consideramos que este expediente por parte de la Comisión es una oportunidad para que el gobierno mexicano destine los recursos y herramientas necesarios para cumplir con los acuerdos internacionales en materia ambiental. Es necesario entender de fondo las causas y detener la alta mortandad de la especie. Desaprovechar la oportunidad nos pondría en una ruta donde todos perdemos, desde enfrentar sanciones comerciales internacionales hasta la afectación a las comunidades pesqueras de la región”, comentó Mario Sánchez, director de la oficina regional noroeste del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA).
El CEMDA y el Centro para la Diversidad Biológica en México destacaron que la publicación del expediente de hechos por parte del Secretariado de la Comisión se produjo a pesar de la oposición de México, luego de que Canadá y Estados Unidos votaran a favor de su investigación. Este paso final en el proceso de investigación permite a personas, organizaciones y entidades plantear inquietudes sobre la aplicación de las leyes ambientales en la región de América del Norte.
Esta situación crítica se agravó aún más cuando la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA Fisheries) emitió una certificación negativa a México en octubre de 2023 debido a la falta de un programa regulatorio adecuado para minimizar la interacción de las tortugas con las actividades pesqueras.
Las tortugas caguama realizan una de las migraciones más grandes del mundo, viajan desde Japón hasta las costas del Golfo de Ulloa en BCS, México, para reproducirse y alimentarse. En su camino enfrentan, entre otras amenazas, el peligro de quedar atrapadas en redes de pesca y, como resultado, morir.
“Con esta investigación y la publicación del Expediente de Hechos respectivo, por parte de la CCA, consideramos necesario que el gobierno de México tome medidas inmediatas y efectivas para proteger de manera adecuada a las tortugas caguama y garantice el cumplimiento de las leyes ambientales aplicables, en línea con los compromisos internacionales asumidos entre los países de América del norte”, señalaron las organizaciones.
LG