Zona metropolitana de Puebla requiere un respiro urbano: Ibero Puebla

El investigador destacó que las ciudades viven un metabolismo, así como el cuerpo de un ser humano.

Aspectos de la ciudad de Puebla. (Andrés Lobato)
Jaime Zambrano
Puebla /

Ante el desarrollo de la Zona Metropolitana de Puebla, la construcción de asentamientos humanos requiere de un diseño con principios sustentables y ambientalmente pertinentes para alcanzar un respiro urbano.

Juan Luis Bolaños Berruecos, especialista en Teoría urbana en Arquitectura de la Universidad Iberoamericana Puebla, explicó que las áreas urbanas presentan una concentración de energía por unidad de superficie, ante lo cual, los flujos generados en las ciudades están provocando múltiples desequilibrios en la naturaleza.

Con la dinámica social de las ciudades, la contaminación del aire genera efectos de isla térmica; además, se presentan problemas en materia orgánica y como consecuencia de la falta de ejercicios de reciclaje; efectos hidrológicos, producto del descuido generalizado del agua, y el energético, con el retroceso de las energías limpias producto de las nuevas políticas.

El investigador de la institución que forma parte del Sistema Universitario Jesuita destacó que las ciudades viven un metabolismo, así como el cuerpo de un ser humano presenta la apropiación de nutrientes, anabolismo y la excreción o catabolismo de comestibles.

“Un proceso similar ocurre en el metabolismo social, donde se presentan procesos de transformación de la materia natural para satisfacer las necesidades de los diferentes grupos poblacionales. Los procesos de anabolismo se relacionan con la producción primaria, como el agrícola y el catabolismo se presenta en la transformación de los recursos en servicios. Esto se traducirá en la generación de residuos, muchos de ellos contaminantes”, comentó.

Una ciudad es un sistema vivo, ante lo cual, es necesario virar hacia esquemas que prioricen la movilidad del transeúnte y de los medios no motorizados, así como el rescate y generación de espacios verdes.

En su análisis “La Ciudad es un Sistema Vivo que Requiere un Respiro”, el investigador de la Ibero Puebla destaca que los asentamientos requieren ser un medio urbanizado cuyo funcionamiento opera con base a los intercambios de materia, energía e información.

“Pese a que en las ciudades se presentan interacciones entre organismos vivos, nuestra dinámica urbana ha ido desplazado a otros seres vivos. Debemos propiciar las condiciones para que se den estas interacciones. El metabolismo urbano determina las exigencias de materias primas y el impacto que su empleo tiene en la biósfera”, comentó.

Para el especialista, es necesario mejorar las calidades del agua, del aire, acústica y de vivienda, así como la seguridad vial y el acceso a áreas verdes, para lo cual, es necesario poner en marcha estrategias de sustentabilidad en las ciudades.

“Es fundamental establecer un programa de ordenamiento ecológico territorial, lo cual definiría el tipo de uso que se le dará al suelo para prevenir situaciones de riesgo y conservar las áreas naturales sin frenar el desarrollo urbano”, explicó.

AFM

LAS MÁS VISTAS