Debido a los reclamos de sus alumnas, el Tecnológico de Monterrey reformó el Protocolo de Actuación para la Prevención y Atención de Violencia de Género incluyendo nueve tipos de sanciones.
La institución publicó el documento ayer por la tarde, pero entró en vigor el lunes pasado; el protocolo mantiene sus tres capítulos, pero con diferentes definiciones que contienen el cumplimiento del dictamen y de los acuerdos de mediación, procesos de investigación, etapa de audiencia y medidas de protección para quienes denuncian.
El documento, originalmente creado en diciembre de 2017, tiene como finalidad asegurar un ambiente de respeto a la dignidad de la comunidad estudiantil y cero tolerancia a conductas inapropiadas que atenten contra la dignidad humana.
Las nuevas sanciones que establece el protocolo son: baja definitiva, amonestación, medida correctiva, suspensión de servicios, condicionamiento, pérdida de derechos, suspensión temporal, acta administrativa y desvinculación.
Además se propone un plan de actuación inmediata para la prevención de la violencia de género, incluyendo a la comunidad LGBT la atención imparcial y transparente de casos reportados alineado a la normatividad interna y a los derechos humanos.
El Tec dijo que evitará la revictimización para dar valor prioritario a la información testimonial que declaren las afectadas en la audiencia institucional que realice la Oficina de Género, la cual elaborará anualmente un informe.