El Reino Unido y la Unión Europea lograron un acuerdo comercial antes de la salida de Londres del eurogrupo; pese a que se convirtió en un Brexit ordenado, existen pendientes y posibles problemas dentro del país británico.

Reino Unido abandonó el eurogrupo tras haber pertenecido por 48 años; el acuerdo con la Unión Europea logró que la salida fuese ordenada.

Cooperación. El primer ministro Boris Johnson describió el acuerdo “no como ruptura sino una resolución”, insistiendo en que Gran Bretaña será un amigo y socio confiable para el resto de Europa al exterior de la UE.

El tratado de libre comercio entrará en vigor el 31 de diciembre.

Negociación. Para el Reino Unido, el acuerdo traerá el gran beneficio de separar la realidad de los sueños; a partir de ahora, la Unión Europea avanzará más rápido hacia sus objetivos compartidos.

Tras el acuerdo comercial con la Unión Europea, el primer ministro británico, Boris Johnson, promete la creación de zonas francas portuarias, entre otras medidas.

Muchas cosas habrán cambiado cuando Reino Unido complete su viaje para salir de la Unión Europea, su mercado único y su unión aduanera, al acabar este año.

El acuerdo introduce derechos de aduana y cuotas en el comercio entre el Reino Unido y la UE, y detalla el cierre de aguas británicas para los pescadores europeos.

El acuerdo comercial será analizado para comprobar que no haya ningún aspecto escondido que pueda resultar problemático para los países miembros de la UE.

Alianza. Todo lo que se prometió al pueblo británico en el referendo de 2016 se cumplió, celebra Boris Johnson; queda una relación sólida y Europa sigue avanzando, afirma Ursula von der Leyen.