En los últimos seis años aumentó de 11.1 a 16.1 el porcentaje de mujeres que son emprendedoras en México; sin embargo, siguen estando debajo de naciones como Chile o Ecuador donde es más de 30 por ciento, de acuerdo con el reporte “Informe sobre el emprendimiento femenino” realizado por el Monitor global del Espíritu Emprendedor (GEM, por sus siglas en inglés).

Según expertos, hay varios motivos que complican que ellas puedan iniciar un negocio, siendo la falta de financiamiento uno de los principales retos que deben enfrentar.
“El financiamiento permite crecer, generar empleos, actualizarse y desarrollar sus emprendimientos, abriendo sucursales nuevas y mejorando las que tienen. Acciones que impactan de forma directa al país, traduciéndose a beneficios de forma tangible en la economía nacional” comentó a MILENIO Ana Laura Medina, directora ejecutiva de Pyme Banorte.
El Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) dice que el problema de las mujeres para acceder al crédito es que no cumplen con los requisitos para obtenerlo. Los principales obstáculos son la falta de recursos propios para ser utilizados como capital social, de títulos de propiedad u otros bienes que podrían funcionar como garantías, de conocimientos empresariales y educación financiera, de un historial crediticio y la falta de experiencia en obtener algún tipo de financiamiento.
“Si el gobierno y el sector privado implementan acciones para sumar más mujeres en la economía, eso se traduciría en autonomía económica para más trabajadoras, mayores ingresos y ahorro para los hogares, mayor rentabilidad y talento para las empresas y crecimiento para México”, destacó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) en un reporte.
Según la última Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas (Enafin), que realiza el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), de las empresas que contaban con algún financiamiento el año pasado, 45 por ciento era liderada por hombres, mientras que 37 por ciento era por mujeres.
“Hay estudios que demuestran que aquellas empresas que tienen una mayor diversidad de género dentro de sus equipos ejecutivos en los consejos de administración y en puestos directivos alcanzan hasta 25 por ciento más rentabilidad que sus competidores que no tienen consejos de administración y liderazgos diversos”, dijo María Fernanda Garza, presidenta honoraria de la International Chamber of Commerce (ICC).
Datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) revelan que las mujeres tienen menos probabilidades de préstamos grandes, lo que sugiere que aunque las mujeres cada vez emprenden más, sus proyectos tienden a ser más pequeños o enfrentan mayores dificultades para escalar debido a la falta de acceso al financiamiento.
Ante esta problemática, el gobierno federal ha implementado programas específicos para apoyar a las mujeres.
Otros retos
María Fernanda Garza de ICC expuso que también persiste una brecha importante en el acceso a la tecnología por género, ya que aproximadamente 5.4 por ciento de las empresas que son fundadas por mujeres en México tienen un enfoque tecnológico.
"Otro tema muy muy importante son las responsabilidades domésticas y familiares que, a pesar de que ha habido avances en esa área, aún las mujeres seguimos siendo responsables de la crianza de los hijos, del cuidado de los adultos mayores, de que llevar la casa, la ropa, la comida. Todo ese tipo de cosas que suenan muy básicas, pero eso limita el que las mujeres puedan acceder a ese tipo de posiciones", refirió.
Además comentó que el reto para las mujeres actualmente es formalizar sus negocios, por lo que es necesario que las cámaras empresariales pueden desempeñar un papel clave en la capacitación y apoyo a las emprendedoras.
En cuanto al perfil de las emprendedoras en la nación, señaló que aunque no hay datos precisos sobre la edad promedio en que las mujeres deciden fundar su empresa, se observa que muchas comienzan a planear su camino desde la universidad.
“Me he dado cuenta muy claramente cómo los jóvenes hay quienes deciden qué van a ser emprendedores, ya tienen una idea o no la tienen, pero saben que ese es su camino. Sin embargo, en general lo que veo es que los jóvenes hoy en día están buscando participar en empresas que tienen un impacto social”, apuntó.
AG