Algunas consecuencias del caso García Luna

Ciudad de México /

Genaro García Luna, el poderoso secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón, ha sido sentenciado después de ser declarado culpable por un jurado; son 38 años de prisión que significan, probablemente, por la edad de García Luna, el resto de su vida.

Es inútil en estos días volver a la discusión de si en verdad es o no culpable de aquello por lo que se le ha sentenciado. Esas cosas solo las resuelven los años, más aún cuando la mayoría, las más serias de las evidencias presentadas en el juicio fueron declaraciones de delincuentes confesos que han obtenido beneficios por lo que dijeron. Esa duda no se irá. Pero, según la ley estadunidense, después de un proceso legal García Luna es culpable.

Pero, insisto, creo que ya no importa. La sentencia de ayer para García Luna es una que marca al país y su tragedia, la de la inseguridad y la violencia, los grupos criminales y la corrupción. Pero también marca la manera en que se ha tratado de combatir.

La primera consecuencia de lo que hemos visto en estos años es: ¿qué policía, qué fiscal, qué militar, qué marino querrá colaborar con las instituciones estadunidenses?

No sé si hay un funcionario mexicano con más reconocimientos que García Luna en sus tiempos de jefe de la seguridad. ¿Qué no era el mejor amigo de la DEA? ¿No se dieron cuenta de lo que dicen que se dieron cuenta un poco tarde?

¿Qué militar, después del arresto del general Cienfuegos, va a confiar en sus contrapartes estadunidenses?

Está claro que la relación en ese asunto está más que rota y que el rapto, si es que así fue, de El Mayo Zambada la ha mandado al abismo.

La duda, que creo es razonable, es si dada la magnitud de la situación de criminalidad, tráfico de sustancias, de armas y la violencia provocada es posible combatirla con esa desconfianza entre vecinos.

Esa, creo, es la mayor consecuencia de la historia que se ha cerrado ayer.

Otra consecuencia, sin duda, es la que pone un sello espantoso para siempre el sexenio de Felipe Calderón. Esa será la memoria colectiva.

Un sexenio cuya marca fue la lucha contra el narco terminó con el jefe de esa lucha condenado por narco. Insisto: más allá de lo que pensemos del juicio y las evidencias y el resultado, eso es.

Así será recordado aquel sexenio.

  • Carlos Puig
  • carlos.puig@milenio.com
  • Periodista. Milenio TV, Milenio Diario y digital, de lunes a viernes. Escucho asicomosuena.mx todo el tiempo.
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.