Autoridades federales detuvieron, en Tamaulipas, a Antonio Alfaro “N”, presunto delincuente requerido por autoridades estadunidenses por los delitos de tráfico de personas y de dinero.
El hombre, de 22 años de edad, fue presentado ante el Instituto Nacional de Migración (INM) tras no poder demostrar su regular procedencia en tierras nacionales. Posteriormente, fue entregado a Marshals, en el distrito de Southern, de Texas.
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el dato¿Qué es el INM?
El Instituto Nacional de Migración (INM) es una institución del gobierno mexicano que se encarga de aplicar la legislación migratoria. Su objetivo es garantizar la seguridad y los derechos de los migrantes, tanto nacionales como extranjeros.
¿Cómo lo detuvieron?
A través de un comunicado, se supo que la detención de Antonio “N” se realizó en la colonia Granjas Económicas, en la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas, como parte de las estrategias de investigación para dar con personas prófugas de la ley.
Durante el operativo participaron elementos de las secretarías de la Defensa Nacional (Defensa), Marina (Semar) y Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Además de personal de la Fiscalía General de la República (FGR) y Guardia Nacional.
“Los agentes de seguridad efectuaron vigilancias fijas y móviles que permitieron ubicar a un sujeto que coincidía con las características del hombre requerido, a quien le dieron alcance y efectuaron su detención”, informaron las autoridades.
Relación entre tráfico de personas y crimen organizado
El 74 por ciento de los tratantes de personas a nivel mundial que han tenido una sentencia están vinculados con grupos del crimen organizado, según el último reporte global sobre trata de personas de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
Según el documento, la gran mayoría de los traficantes condenados en 2023 se dedican a la trata con fines de explotación sexual, sin embargo, aquellos relacionadas con el trabajo forzado pueden tener un número de víctimas más alto debido a que tienen “un mayor nivel de profesionalización” en comparación con otras modalidades de este delito.
El reporte también revela un resurgimiento de la explotación sexual con modalidades sofisticadas al resaltar que el número de víctimas detectadas incrementó un 41 por ciento en 2022 comparado con 2020, luego de la disminución registrada por la pandemia de covid-19.
Detalla que el género femenino sigue siendo es el más atacado en este rubro ya que del total de víctimas el 64% son mujeres y el 28 por ciento niñas.
Con información de Carlos Vega.
RM