El uso de la tecnología ha acompañado a la humanidad desde sus inicios. Hoy por hoy, por ejemplo, su avance ha llegado al punto de que en la vida de muchas personas desplazó el uso de efectivo para dar paso a transferencias, pagos con códigos QR o, a veces, incluso, con reconocimiento facial.
Una revolución que, sin duda, hace más fácil las transacciones cotidianas del día a día. Y si bien es cierto que el ámbito económico o de los intercambios mercantiles no es el único donde la tecnología juega un papel preponderante, sí es donde más casos de fraudes y estafas se registran.
- Te recomendamos Ciberseguridad y resiliencia operacional, puntos clave para el crecimiento de la banca digital: CNBV Negocios
En este contexto, autoridades y asociaciones de especialistas alertan por ataques o amenazas contra consumidores. Uno de estos focos rojos es la llamada 'estafa del sí'. Para que no te tome por sorpresa, te contamos de qué trata.
¿Qué es la ‘estafa del sí´?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INC), una entidad europea, el fraude del sí es un ataque que recurre a llamadas telefónicas para que las personas afectadas contesten con un simple “sí”. ¿El objetivo? Que ese “sí”, dicho por las víctimas, se convierta en una herramienta de autentificación con la que posteriormente se podrán obtener datos personales, como los bancarios.
¿Cómo funciona?
Todo comienza con una llamada telefónico, donde los delincuentes se hacen pasar por representantes de instituciones bancarias, servicios de ventas, soporte técnico u otros.
"El estafador puede utilizar técnicas de ingeniería social para generar confianza, como mencionar información personal básica de la víctima o hacer referencia a una supuesta transacción reciente. También se puede dar el caso de que llamen a la víctima y cuando este diga “sí”, nadie le responda. En este último caso, obviamente no se establece ninguna conversación entre emisor y receptor", informa el INC.
Después, el estafador procederá a hacer preguntas "aparentemente inocuas para obtener respuestas de tipo "sí". Estas preguntas podrían incluir frases como "¿Está usted autorizando transacciones en este momento?" o "¿Está de acuerdo en recibir actualizaciones de nuestros servicios?". Es habitual que el ciberdelincuente permanezca en silencio a la espera de una respuesta afirmativa por parte de la víctima y cuelgue a los pocos segundos sin dar una respuesta".
Cuando se obtiene el "sí" de la víctima, el estafador usará la grabación para intentar obtener, por ejemplo, servicios bancarios a nombre de la víctimas.
"Puede hacerlo llamando a la entidad financiera o del servicio y proporcionando la grabación de voz como supuesta confirmación de identidad".
¿Cómo evitar ser víctima de este fraude?
Dado que el fraude, según se ha detectado, principalmente opera con llamadas telefónicas, la principal recomendación es evitar a toda costa contestar llamadas de números desconocidos. Pero también es importante atender las siguientes recomendaciones:
- Mantén la calma: Es comprensible sentirse preocupado o asustado, pero intenta mantener la calma y pensar con claridad. La toma de decisiones racionales te ayudará a abordar la situación de manera más efectiva.
- Cuelga la llamada: Si sospechas que la llamada es fraudulenta o no te sientes cómodo con la situación, simplemente cuelga. No proporciones ninguna información adicional y evita prolongar la conversación.
- Verifica la legitimidad: Si la llamada supuestamente proviene de una entidad financiera o empresa legítima, busca el número de contacto oficial de esa organización y llámalos directamente para verificar la autenticidad de la llamada. No utilices los datos de contacto proporcionados por el presunto estafador, ya que podrían ser falsos.
- Monitoriza tus cuentas: Haz un seguimiento cercano de tus cuentas bancarias y tarjetas de crédito para detectar cualquier actividad inusual. Si notas transacciones no autorizadas, informa a tu banco de inmediato.
- Controla la información que circula sobre ti en la red: Realiza egosurfing para conocer la información sobre ti publicada en Internet. Además, activa las alertas de Google para recibir notificaciones sobre menciones de tu nombre o información personal y poder tomar las medidas necesarias para su retirada de Internet.
- Cambia las contraseñas y códigos de seguridad: Para estar seguro, cambia las contraseñas y los códigos de seguridad relacionados con tus cuentas que pudieran estar comprometidas. Utiliza contraseñas fuertes y únicas que sean difíciles de adivinar.
- Mantén registros: Guarda cualquier evidencia relevante, como números de teléfono, grabaciones de llamadas, correos electrónicos o mensajes de texto recibidos durante la estafa. Estos registros pueden ser útiles para informar a las autoridades y respaldar cualquier reclamo futuro.
- Te recomendamos Fraudes, acoso y hacking, los principales incidentes cibernéticos reportados en NL Comunidad
rarr