La plataforma Alertadores Internos y Externos de la Corrupción, que presentó la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, es un instrumento que forma parte del quinto eje del programa anticorrupción de la dependencia.
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Esta herramienta permitirá a servidores públicos y ciudadanos en general presentar denuncias confidenciales sobre hechos de corrupción de los que sean testigos.
A través de alertadores.funcionpublica.gob.mx se puden realizar las denuncias.
De acuerdo con Sandoval Ballesteros, su implementación en México era un compromiso firmado en acuerdos multilaterales desde hace más de 20 años y que los gobiernos anteriores no habían implementado.
Aunque actualmente se tienen elementos en la legislación mexicana para fomentar la denuncia contra actos de corrupción, como la Ley General de Responsabilidades Administrativas, ni ésta ni el Código Penal ofrecen protecciones, incentivos o herramientas seguras para los informantes.
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“En la lógica de la corrupción se ha querido menoscabar el valor de quien se atreve a denunciar, de quien tiene el imperativo moral de hacer lo correcto y una motivación ética de actuar en contra de la corrupción. Y así como se le ha querido soslayar, también se les amedrenta y amenaza para que no digan nada, para que guarden silencio”, afirmó el 25 de julio pasado, cuando la plataforma se presentó en la sede de la Secretaría.
La secretaria explicó que el auspicio y la protección de los alertadores de la corrupción, también conocidos como whistleblowers en los países de habla inglesa, es una de las estrategias contra la corrupción y la impunidad de mayor éxito en el mundo.
Para garantizar una buena implementación, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) perfiló en un documento presentado el 9 de diciembre de 2016, en el marco del Día Internacional contra la Corrupción.
Éstas son las recomendaciones de la OCDE:
- Debe garantizar protección a los denunciantes, incluyendo el resguardo contra represalias y posibles intentos de soborno.
- Contener instrucciones claras sobre cómo reconocer los indicadores de corrupción y definir pasos claros a seguir, como ante qué autoridad acudir.
- Asegurar un amplio acceso al mecanismo de reporte seguro para poder incluir a la mayor cantidad de participantes.
- Comunicar claramente cómo hacer estos reportes de manera confidencial, incluyendo, de ser necesario, ensayos.
- Dar seguimiento a los reportes de incidentes y sospechas de manera oportuna.
- Expresar claramente y con frecuencia sobre los procesos y resultados de los reportes de corrupción para así construir confianza y reducir cualquier percepción de opacidad alrededor de las investigaciones.
OMZI