Trump está más preocupado por suprimir el voto por correo que el covid-19: Obama

El ex presidente de Estados Unidos defendió al Servicio Postal de Estados Unidos, que enfrenta un problema de logística para entregar las boletas debido a su situación financiera.

El voto por correo está permitido en el sistema electoral de Estados Unidos. (AP / AFP)
Editorial Milenio
Washington D.C. /

El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró que el gobierno encabezado por su sucesor, Donald Trump, está más preocupada en "suprimir el voto que en suprimir el virus" que ha provocado más de 160 mil muertes por la pandemia en el país.

Obama defendió en Twitter el papel de Servicio Postal, atacado por Trump en varias ocasiones y al que dijo que no iba a proveer los fondos adicionales que solicitan porque serían utilizados para facilitar el voto por correo, del que dependerán un gran número de estadunidenses para los comicios del 3 de noviembre por temor a la pandemia.

"Todo el mundo depende del USPS (Servicio Postal de Estados Unidos). Los mayores para su seguridad social; los veteranos para las medicinas; los pequeños negocios que quieren mantener las puertas abiertas. No pueden ser un daño colateral de una administración más preocupada por suprimir el voto que por suprimir el virus", señaló el ex mandatario, que hasta ahora se había mantenido al margen del fragor de la campaña.

En una rueda de prensa del jueves, Trump se opuso a aumentar los fondos al Servicio Postal, que se encuentra al borde de la quiebra, porque no quiere que se utilice para el voto por correo, que asegura que es una técnica de voto fraudulenta.

"Quieren 3 mil 500 millones de dólares para algo que se ha demostrado que es fraudulento, que será básicamente dinero electoral. Quieren 3 mil 500 millones de dólares para el voto por correo. Voto por correo universal", señaló Trump en rueda de prensa, pese a que él mismo solicitó esta semana votar por esa vía a distancia.

Trump ha repetido varias veces que el voto por correo es fraudulento, ya que cualquiera puede suplantar la identidad del votante y porque el sistema de correos es deficiente. No obstante, expertos y autoridades estatales aseguran que es casi imposible suplantar la identidad o falsificar el voto, mientras que sí se han dado casos este año de votos válidos no contabilizados por la alta demanda del voto no presencial.

El Servicio Postal advirtió hoy que votantes en 46 de los 50 estados del país podrían no poder ejercer su derecho al voto por correo debido a retrasos en el procesamiento de las papeletas.

El servicio de correos estadunidenses dice que no podrá garantizar la llegada a tiempo de los votos pese a que los ciudadanos sigan las instrucciones, debido al esperado aumento de la demanda de este tipo de votación y por la falta de recursos.

Unos 180 millones de estadunidenses tienen la capacidad de votar por correo en estos comicios, pero el Servicio Postal lleva acusando años de falta de fondos y planes de sosteniblidad claros. Los demócratas en el Congreso han propuesto dar 25 mil millones de dólares en fondos de emergencia al Servicio Postal, con 3 mil 600 millones adicionales para el manejo del voto por correo.

Este viernes, Trump no quiso ahondar en esa polémica y se mostró abierto en una rueda de prensa a la propuesta de financiamiento de los demócratas en el Congreso "si ellos nos dan lo que queremos (...) Lo que quiere el pueblo estadunidense", dijo en referencia a un nuevo paquete de estímulo por la pandemia.

Algunos estados esperan un aumento del voto por correo 10 veces superior al habitual y el director del Servicio Postal, Louis DeJoy, un donante de la campaña de Trump nombrado en junio por el mandatario para este puesto, está ejecutando un plan de recortes que podría afectar a centenares de máquinas que automatizan el correo y que son vitales para procesar votos.

Mientras tanto, el estado de Nueva Jersey anunció hoy que se suma a otros ocho estados que tendrán voto por correo universal (todo el mundo recibe su papeleta en el buzón) para las elecciones de noviembre, con lo que esperan que la mayor parte del voto se haga sin tener que ir al colegio electoral, evitando así exponerse a la covid-19.

Kamala Harris había competido contra Joe Biden para la nominación demócrata presidencial. (AP)

Trump inicia su campaña atacando a Biden y Kamala Harris

La batalla por el voto por correo, que será central para asegurar una alta participación durante las elecciones del 3 de noviembre en Estados Unidos, marcó el comienzo de una campaña electoral que sigue protagonizada por las acusaciones de Donald Trump de que el voto a distancia es fraudulento y deficiente y que no hará nada para facilitarlo.

El presidente estadunidense comenzó hoy a organizar su contrataque a la campaña del virtual candidato demócrata, Joe Biden, con el anuncio de varios mítines que competirán en atención con la convención demócrata de la semana próxima.

La campaña de Trump anunció que visitará los estados clave de Wisconsin, Minesota, Arizona y, según medios locales, posiblemente también Pensilvania durante los días en que se celebra la convención demócrata, del 17 al 20 de agosto.

El cónclave demócrata, organizado en un principio en Milwaukee (Wisconsin), pero que debido a la pandemia se celebrará virtualmente, sin las grandes multitudes de otros años, presentará el programa electoral del Biden y su compañera de fórmula, la senadora Kamala Harris, cuya entrada en escena ha contribuido a atraer en solo unos días la atención mediática, una mejora en las encuestas y más de 48 millones de dólares en donaciones de campaña.

La "contraprogramación" planteada por Trump se centrará en presentar los "fallos de Joe Biden en empleo y economía", así como en atacar al precandidato demócrata a la presidencia en migración y seguridad fronteriza, uno de los temas centrales de la campaña que encumbró al republicano a la Casa Blanca en 2016.

El mandatario sostiene sus ataques a la aspirante demócrata a la vicepresidencia, la senadora californiana Kamala Harris, por "tratar peor que a nadie" a Biden durante el período en que ambos compitieron en las primeras demócratas por la candidatura presidencial.

El mandatario dio oxígeno este jueves a teorías sin fundamento jurídico de que Harris no puede ser presidenta o vicepresidenta porque es hija de padre jamaicano y madre india, pese a que nació hace 55 años en California.

La Constitución asegura que solo un "ciudadano natural por nacimiento" puede ser presidente de Estados Unidos, pero recientemente en un artículo en Newsweek un profesor de derecho especuló con que esa figura no aplica a estadunidenses con ambos padres extranjeros, algo que no está en línea con la interpretación comúnmente aceptada.

No obstante, Trump se ha servido del ruido creado para resucitar unas dudas sobre la nacionalidad de Harris del mismo modo que hizo en su día con Barack Obama, una polémica sobre el certificado de nacimiento que financió sin mostrar prueba alguna que respaldara su teoría y que en alguna medida le sirvió para cimentar sus aspiraciones presidenciales.

dmr

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