Ante poco más de 100 participantes de la X edición de What a Woman, la doctora Elisa Sacal habló de la importancia de dormir bien para sentirnos y lucir bien durante el día.
La doctora destacó la importancia de respetar los horarios destinados al sueño; y el rol que tiene la luz y el ambiente en el periodo que destinamos a dormir para que realmente descansemos, por lo que propuso un método “donde vamos a priorizar, agendar y repetir”, con la idea de adquirir hábitos que nos favorezcan.
“Para Priorizar tenemos que poner atención a la alarma, la mayoría creemos que es para despertar, pero la persona que duerme bien no debería usar una alarma. Si todos los días te está despertando la alarma disruptiva; te despiertas asustado y con latido cardiaco a todo lo que da, eso es porque no te estás dando tiempo suficiente para dormir. Si duermes bien, en algún momento tu cuerpo solito se va a despertar”.
Por ello Sacal comentó que lo mejor es “usar la alarma para irse a dormir” y aconsejó no tenerla “al lado en el buro, de preferencia va en otro espacio y no necesitan ver el reloj, solo crean más ansiedad”.
De acuerdo a las necesidades fisiológicas, “lo ideal es destinar 8 horas para estar en tu cama, porque la mayor parte de la gente que duerme menos de 7 horas (el 30% de los mexicanos), no es porque no puedan, sino porque no están acostados. Entonces, hay que definir horarios, hay que pensar a qué hora te tienes que despertar, recorre 8 horas para atrás y pones tu alarma para irte a dormir”.
La doctora aconseja “respetar los tiempos destinados al sueño tanto entre semana, como el fin de semana y no variarlos, incluso si te fuiste a dormir tarde el sábado por la noche, despiértate no más de 30 minutos de la hora habitual, porque si no, qué pasa el domingo en la noche, como el vienes te dormiste tarde, sábado aún más; el domingo que te quieres dormir temprano ya no puedes. Y te acuestas y no te puedes dormir, el problema es que vas asociando en tu mente que te cuesta trabajo dormir y empiezas con ansiedad y a crear asociaciones negativas en torno al sueño”.
La luz fundamental en el proceso del sueño
Durante la conferencia que ofreció Sacal en el encuentro de mujeres, destacó que “un componente importantísimo en el proceso del sueño es la luz, la dosis y el horario, la intensidad y el color; nuestros ritmos biológicos están diseñados para recibir una luz solar, que tiene un espectro azul y es activadora, prende al cerebro. Eso lo necesitamos en la mañana”:
Sin embargo, comentó que de acuerdo a los hábitos que tenemos regularmente no cumplimos con ese paso en el proceso, lo que va interfiriendo en el descanso.
“Muchísima gente no está expuesta a luz natural en la mañana porque se despiertan con este nuevo horario y no ha amanecido. Te metes al coche antes de que amanezca, te pones los lentes oscuros y después te metes a la oficina y ya no viste la luz del sol; y precisamente lo que va a hacer que produzcas suficiente hormona de sueño es el tiempo que te expusiste al sol en la mañana temprano”.
La recomendación de la doctora es “exponernos a la luz solar, de preferencia al exterior, obviamente sin lentes oscuros, por lo menos 10 o 15 minutos, y lo mejor es la primera hora después de despertar y antes de las 9 porque es el sol que sincroniza nuestro reloj interno”.
En contraste, destacó que “la luz rosita y naranja, es la luz que tenemos que consumir una vez que el sol se mete; el ser humano está hecho para vivir en una era donde no había luz artificial; por eso cuando el ser humano se expone a la luz, el cerebro no entiende lo que está pasando; por qué, porque la única luz a la que se podían exponer nuestros ancestros era a la luz del fuego y esa luz que es naranja sí permite que nuestra melatonina, que es la hormona que te avisa cuando es el momento de dormir, se libere.
“De hecho esa melatonina es tan sensible que si te levantas en la noche a hacer pipi y prendes la luz, esa melatonina se va a ir al suelo; y si te acuestas, puede ser que logres dormir, pero la melatonina va a tardar 90 minutos o más en volver a levantarse, así que esa hora va a ser un sueño artificial o una hora de sueño chatarra. De tal forma que lo mejor es que cuando se meta el sol, tenemos que bajar la intensidad y el color de la luz que estamos consumiendo en casa. Tratar de poner un foco de luz naranja, incluso rojo, para que el cerebro no reciba luz activadora”.
Además, destacó que si bien toda la luz en la noche puede afectar la calidad del sueño “la que emiten las pantallas, de los celulares, teléfonos, tabletas, televisiones, etc., lo activan porque el cerebro la registra como si fuera luz solar; entonces te activas y adiós sueño”.
El ambiente frío ideal para dormir
Otro componente de la higiene del sueño “es el ambiente, el ser humano fue diseñado para dormir en espacios como cavernas, que son oscuras, frescas, silenciosas, entonces empecemos a hacer un espacio similar al de una caverna, quizá más cómodo en nuestra habitaciones”, comento.
Al hablar del grado de oscuridad que es ideal para dormir comentó: “Traten de ver la palma de su mano, y si la logras ver todavía puedes oscurecer más, pongan velcro en la cortina, en las orillas de la ventana de tal forma que todo esté oscuro durante la noche”.
El tema de la temperatura también merece especial atención y la doctora recomendó que “la habitación o el lugar donde se duerme debe estar lo más fresco posible, es el factor que más cambia cuando viene una persona a conciliar el sueño; cuando le bajas la temperatura mejora muchísimo la profundidad del sueño, es mucho mejor tener frío o fresco y que te tapes; a que el ambiente sea caluroso y tengas que prender el ventilador”.
Y finalmente recomendó que se debe abandonar la idea de que en la cama “se puede comer, trabajar o hacer otra actividad porque el cerebro empieza a hacer asociaciones; entonces en los microdespertares, en lugar de que el cerebro asocie ese espacio con dormir, empieza con la mente activa porque le diste esa oportunidad; así que lo más realmente recomendable es que usen la cama nada más para dormir y para tener sexo”.
Claves
La X edición de What a Women se convirtió en el centro de reunión de mujeres que también escucharon pláticas de emprendimiento, salud, belleza y finanzas; en algunas de las cuales se generó una gran interacción.
La fiesta de las mujeres dio la oportunidad a diversas mujeres emprendedoras de ofrecer sus productos en el market que se montó en la sede del What a Woman, el hotel St Regis, donde las participantes adquirieron vestidos, propuestas de alimentos saludables, accesorios de belleza, etc.